Josefina era, hasta este domingo, un pueblito más de los tantos que existen en teritorio santafesino. Pero esa comuna del departamento Castellanos, ubicada a 130 kilómetros de la capital provincial y a 90 de Rafaela, fue escenario este fin de semana de un estremecedor caso policial que evoca a la novela A sangre fría, de Truman Capote. Y entonces ya nada volvió a ser lo mismo.

Un adolescente, de 17 años, ingresó en la madrugada de este domingo a una casa (ubicada en las calles 70 y 15) para robar, pensando que adentro no había nadie.

Para su sorpresa, dentro de la vivienda estaba toda una familia.

El resultado del encuentro fue fatal: el menor tomó un cuchillo de la cocina y, uno a uno, fue matando a los habitantes del hogar.

A puñaladas perdieron la vida una mujer de 38 años y tres de sus hijos: una nena de 13, un varón de 9 y otra nena de 7.

La única sobreviviente fue una nena de 4 años que habría logrado esconderse dentro de una alacena de la cocina.

Los cuerpos fueron encontrados este domingo, cerca de las ocho de la mañana.

El menor –que en principio no tendría antecedentes– quedó detenido, a disposición de la jueza de menores de la ciudad de Rafaela, que es quien tiene jurisdicción en la zona.