Científicos de la Universidad de Ulster, en el Reino Unido, han descubierto que un fármaco que se emplea en el tratamiento de la diabetes de tipo 2 podría utilizarse para ayudar a los pacientes que padecen enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.

Estudios anteriores han demostrado que la diabetes de tipo 2 es un factor de riesgo conocido de la enfermedad de Alzheimer y los investigadores consideran que una señalización disfuncional de la insulina en el cerebro podría alterar las neuronas y contribuir a la activación de la patología. Los resultados se han publicado en Brain Research.

El profesor Christian Hölscher y sus colaboradores del Instituto de Investigación de Ciencias Biomédicas de la región de Ulster realizaron el descubrimiento después de utilizar un fármaco experimental denominado (Val8)GLP-1. Su labor reveló que este fármaco estimula la actividad de la GLP-1, una proteína que se sabe que ayuda al organismo a controlar la respuesta a la concentración de azúcar en sangre.

En este estudio, los investigadores observaron que el (Val8)GLP-1 entra en el cerebro sin producir ningún efecto secundario (con la posología con la que se realizaron las pruebas); esto es lo contrario de lo que suele ocurrir con los fármacos, que no pueden saltar directamente del torrente sanguíneo al cerebro.

Este fármaco motivó el crecimiento de neuronas nuevas en el hipocampo, el área del cerebro que convierte la información de la memoria reciente en memoria remota. Las pruebas realizadas indicaron que el bloqueo del efecto de la GLP-1 en el cerebro provoca un deterioro de las tareas de aprendizaje y memoria, pero este efecto no se observa cuando se utiliza el fármaco.

Fuente: Tendencias 21