Barcelona, de España, con un gol del delantero argentino Lionel Messi, se quedó con la primera edición de la Copa Franz Beckenbauer al vencer este miércoles a Bayern Munich por 1 a 0, en el estadio mundialista de la Allianz Arena.
El gol de la Pulga se produjo a cinco minutos del final del partido jugado ante casi 70 mil espectadores. Messi, que no fue titular, convirtió el gol al clavar un zurdazo impecable desde el borde del área.
Messi fue objeto del afecto de un hincha, aparentemente argentino, que ingresó al campo de juego para saludarlo y colocarle un gorro en la cabeza. El intruso tuvo que ser contenido por los empleados de una empresa de seguridad. Por una situación parecida pasó el jugador en la última Copa América disputada en Venezuela.
El cotejo le dio marco a la despedida del veterano alemán Mehmet Scholl. Los dos conjuntos presentaron a sus mejores figuras, que sin embargo actuaron de acuerdo al carácter del encuentro, un amistoso.
Barcelona tuvo al brasileño Ronaldinho, al francés Thierry Henry, al camerunés Samuel Eto’o y al mexicano Rafael Márquez entre los titulares y después ingresaron Messi y el mexicano Giovani Dos Santos. Bayern Munich, con el italiano Luca Toni, el francés Franck Ribéry, el argentino Martín Demichelis y los brasileños Lucio y Zé Roberto, se acomodó ante la inoperancia de Barcelona y se limitó a gozar la fiesta.
El equipo alemán jugará el próximo sábado ante Werder Bremen, su eterno rival, en un partido de la Bundesliga. Sobre el final del encuentro y ante la falta de espectáculo en el terreno de juego, los hinchas empezaron a expresar su descontento con silbidos, de los que se salvó el festejado Scholl en su último partido para Bayern, a los 36 años y después de 15 temporadas.
Sin embargo Messi tenía reservado algo para el final: a los 40 minutos del segundo tiempo colocó un zurdazo impecable de primera que se incrustó en la red.
Fuente: Télam
El gol de la Pulga se produjo a cinco minutos del final del partido jugado ante casi 70 mil espectadores. Messi, que no fue titular, convirtió el gol al clavar un zurdazo impecable desde el borde del área.
Messi fue objeto del afecto de un hincha, aparentemente argentino, que ingresó al campo de juego para saludarlo y colocarle un gorro en la cabeza. El intruso tuvo que ser contenido por los empleados de una empresa de seguridad. Por una situación parecida pasó el jugador en la última Copa América disputada en Venezuela.
El cotejo le dio marco a la despedida del veterano alemán Mehmet Scholl. Los dos conjuntos presentaron a sus mejores figuras, que sin embargo actuaron de acuerdo al carácter del encuentro, un amistoso.
Barcelona tuvo al brasileño Ronaldinho, al francés Thierry Henry, al camerunés Samuel Eto’o y al mexicano Rafael Márquez entre los titulares y después ingresaron Messi y el mexicano Giovani Dos Santos. Bayern Munich, con el italiano Luca Toni, el francés Franck Ribéry, el argentino Martín Demichelis y los brasileños Lucio y Zé Roberto, se acomodó ante la inoperancia de Barcelona y se limitó a gozar la fiesta.
El equipo alemán jugará el próximo sábado ante Werder Bremen, su eterno rival, en un partido de la Bundesliga. Sobre el final del encuentro y ante la falta de espectáculo en el terreno de juego, los hinchas empezaron a expresar su descontento con silbidos, de los que se salvó el festejado Scholl en su último partido para Bayern, a los 36 años y después de 15 temporadas.
Sin embargo Messi tenía reservado algo para el final: a los 40 minutos del segundo tiempo colocó un zurdazo impecable de primera que se incrustó en la red.
Fuente: Télam