Entre los proyectos aprobados este jueves en un activo Concejo -que aumentó la tarifa de taxis- se encontraron los planes de detalle de las Unidades de Gestión N° 1 y N° 6 correspondientes a los últimos tramos de urbanización de Puerto Norte. Los mismos incluyen además de mega torres, la apertura de espacios verdes y ventanas al río.

Para el oficialismo, el proyecto no sólo permitirá concretar un emprendimiento inmobiliario que jerarquizará a Rosario si no que incorporará 5,4 hectáreas al municipio –más de la mitad de la superficie total–, terrenos que serán cedidos por el propietario privado y serán destinados a espacio público.

La reconversión de antiguas tierras ferroviarias y portuarias abrirá un nuevo acceso a la costa, emprendimiento que completará un paseo continuo desde La Fluvial hasta la planta potabilizadora de Aguas Santafesinas (Assa). En el marco de la urbanización, la empresa deberá realizar importantes obras como duplicar la traza de avenida de la Costa, entre los bulevares Oroño y Avellaneda, ampliación que conectará la ciudad desde el norte hacia el centro. Además, construirá corredores, paseos, ramblas, dársenas de estacionamiento y parques que formarán parte del patrimonio local
 
En esa línea, el proyecto, que se encuentra en estudio en el Concejo Municipal desde el 5 de junio de este año y se debatió en las comisiones de Planeamiento y Gobierno, incorpora el desarrollo urbanístico de dos parcelas más de Puerto Norte. 

Unidad de Gestión N° 1 (Ex Faca)
 
La superficie de la parcela correspondiente a la Unidad N° 1–comprendida entre las calles French, Echeverría y avenida Luis Cándido Carballo, además de su prolongación hasta el río– tiene una superficie de 84.000 metros cuadrados, de los cuales 43.000 metros cuadrados serán cedidos al municipio para espacios públicos.  Esa ejecución deberá ser financiada en su totalidad por el urbanizador privado, según los señalamientos del proyecto municipal.
 
En cuanto a las obras públicas que deberá encarar la empresa –además de la doble traza de la Avenida de la Costa– se señala la apertura de los pasajes Nº 720 y 718, paralelos a Echeverria, y la calle Rawson.

La empresa también deberá construir: una rambla sobre la barranca de 230 metros, una plaza con vista al Río y paseo peatonal central, cocheras subterráneas debajo de todo el predio y dársenas de estacionamiento público.

Las siete torres de 22 pisos privadas y el resto de las obras tiene un plazo de ejecución de 15 años.

Unidad de Gestión Nº 6 (ex Unidad Portuaria III)
 
La superficie total de la parcela que refiere a la Unidad de Gestión Nº 6 es de 24.000 metros cuadrados, destinándose 11.000 metros cuadrados para espacio público, sector que corresponde al 45 por ciento del área total.

Entre las principales obras a ejecutar para la comunidad, el proyecto incluye la segunda mano de la Avenida de la Costa –entre Madres Plaza de Mayo y bulevar Oroño–, ramblas rodeando el predio, la construcción del Parque de la Arenera, en la franja pública desde Sunchales  hasta avenida Francia, y cocheras subterráneas debajo de todo el predio y dársenas de estacionamiento público a nivel.
 
En este caso, las dos torres de 42 pisos más la ejecución completa del proyecto deberá realizarse en 10 años, como máximo.

Contra la enajenación de la costa

El Bloque Encuentro por Rosario, integrado por los concejales María Eugenia Bielsa y Fernando Rosúa, votó en general la ordenanza referida al Plan de Detalle correspondiente a las Unidades de Gestión 1 y 6, pero en particular se opuso al artículo 7 de dicha ordenanza.

"Este artículo es una excepción que permite a un particular construir un edificio sin respetar los 34 metros que deben quedar libres desde el borde superior de la barranca. De esta manera, se privilegian los intereses de un desarrollador inmobiliario por sobre los intereses colectivos porque se impide el derecho al uso público de la costa”, señaló Bielsa.

La legisladora agregó: “Nosotros nos oponemos a cualquier enajenación privada que impida a la ciudadanía el acceso a la costa, y acompañamos la posición y la lucha que mantienen los vecinos del barrio desde hace 13 años, no sólo en este sentido, sino también respecto al traslado de la cerealera".