Dicen que las comparaciones son odiosas. ¿Pero es molesto que comparen a Rosario con París o con Mónaco? ¿Qué hay con Kampala o Ciudad del Este? Las calles, algunas construcciones o lugares públicos pueden recortarse como postales, que de mirarlas con atención, permiten un viaje a otros rincones en el mundo, retenidos en la memoria después de viajes o simplemente guardados en la retina luego de hojear un libro o un álbum de fotos.

Una cadena de mails transporta una serie de fotos de la ciudad, puestas a la par de registros fotográficos de otros lugares en diversos países, invitando a la comparación y permitiendo descubrir que el devenir del hombre por el mundo deja sus huellas y de que hay más cosas en común entre las culturas de lo que se puede o se quiere ver.