El nuevo Complejo Educativo Bilingüe e Intercultural tiene la capacidad para albergar a 900 alumnos, y en la actualidad la mayoría de los estudiantes de las escuelas que forman parte del nuevo Instituto son toba, uno de los pueblos originarios más numerosos de la región.

El director del Complejo, Miguel García, quien además es docente de lengua Qom, expresó que el nuevo edificio que ocupará la institución "es único por su diseño y tiene 4 mil metros cuadrados". El establecimiento, que dará clases en los tres turnos, cuenta con 12 aulas tradicionales y otras dos destinadas a enseñanza técnica.

El nuevo centro educativo, que por sus características edilicias, y educativas centralizará a tres colegiaturas de Gestión Social Indígena del Lqataxac Nam Qompi, la Escuela de Familia Agroecológica Nº 185, el Bachillerato para Adultos, la Tecnicatura en Enfermería, y un Instituto de Nivel Terciario.

En este sentido, García precisó que dentro del nivel terciario "hay dos profesorados, uno de Educación de Lengua Intercultural, y la otra Sentido Social Indígena, que es una tecnicatura de comunicación indígena".

El Complejo es bilingüe porque se dictan las clases en "toba, nuestro idioma, nuestra lengua materna que tiene reconocimiento del estado provincial, y en español", agregó tras destacar que el programa es oficial y la materia clave es Lengua Qom.

García expresó su deseo de que esta obra permitirá garantizar la inserción educativa de las comunidades de los pueblos originarios.

El instituto fue construido en Pampa del Indio, una ciudad donde viven alrededor de 15 mil habitantes, ubicada en el norte de la provincia del Chaco, donde se concentra gran parte de los pueblos originarios toba, wichi y mocovi.

Los toba se encuentran entre los pueblos originarios con mayor población en el país, luego del mapuche y el kolla, con casi 70 mil habitantes, según los últimos datos del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas, y la mayoría vive en las provincias de Chaco, Formosa, Santa Fe, y en menor medida en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano.

Fuente: Telam