La policía detuvo hoy a dos de los dueños del local noturno de la ciudad rusa de Perm en el que al menos 102 personas murieron y otras 135 resultaron heridas en la noche del viernes al sábado debido a un incendio.

En un primer interrogatorio uno de los detenidos negó que el local se incendiara a raíz de un uso irresponsable de fuegos artificiales, explicó un portavoz de la policía citado por la agencia Interfax.

En una grabación que retransmitió la televisión rusa pudo verse cómo chispas procedentes de una fuente prendían una cortina de plástico. Según las primeras investigaciones, el local no tenía ventanas y contaba con una única salida.

Los funcionarios señalaron que hay 134 personas heridas, 85 de ellas en estado crítico. Diez de ellas serán trasladados a Moscú para su tratamiento. La población de la ciudad de Perm, a unos 1.400 kilómetros al este de Moscú, fue llamada a donar sangre.

Se estima que había 233 personas en el lugar con motivo de una fiesta dada por los dueños para festejar los ocho años del local.

De acuerdo con el ministro de Seguridad regional, Igor Orlov, a las 2:15 horas locales del sábado un fuego artificial prendió una cortina de plástico que colgaba del escenario. Según Orlov, el fuego se propagó rápidamente.

El portavoz de las investigaciones, Vladimir Markin, descartó la hipótesis de un atentado.

La mayoría de las víctimas presentan quemaduras e intoxicación por monóxido de carbono, según agregó Markin. Además, varias personas resultaron heridas en la estampida debido al pánico que se desató en el local como consecuencia de las llamas. Testigos relataron que la mayoría de las personas que estaban en el lugar eran empleados y del local y sus amigos o familiares.

El primer ministro, Vladimir Putin, ordenó que se envíe un avión a Perm con médicos y asistentes sanitarios adicionales. Además, decidió la creación de una comisión investigadora liderada por el ministro de Protección de Catástrofes Sergei Shoigu. El presidente ruso, Dmitri Medvedev, pidió a los ministros de Emergencia, Interior y Salud que vuelen a Perm para coordinar la asistencia en el lugar.

La semana pasada, 26 personas murieron en un atentado terrorista contra la línea de tren entre Moscú y San Petersburgo.