Debió transpirar bastante Barcelona para quedarse con la Supercopa europea, trofeo puesto en disputa en Mónaco entre el última ganador de la Liga de Campeones y el campeón de la Copa Uefa. Este viernes, el elenco dirigido por Pep Guardiola ganó por 1 a 0 y lo hizo en tiempo suplementario gracias a una genialidad de Messi.

El crack rosarino estuvo bien marcado durante todo el pleito por la defensa de Shakthar Donetsk, que aguantó el cero hasta el final de los 90 minutos. Ya en el suplementario, y cuando apenas faltaban tres minutos para los penales, Lionel frotó la lámpara: armó un jugadón a la entrada del área, metió un pase milimétrico al centro y dejó solo a Pedro, que sólo tuvo que tocarla a un palo para desatar la euforia culé.

Tras el tanto no hubo tiempo para la reacción ucraniana y sí para el festejo del conjunto blaugrana, que enhebró así el quinto título de la temporada (Copa del Rey, Liga española, Champions League, Supercopa española y Supercopa europea). Todas las miradas apuntaron al muchachito argentino, que viene de coronarse mejor jugador del viejo continente y llegará afilado al esperado clásico con Brasil.