Una nave llena de basura espacial caerá en el Océano Pacífico. El buque de carga Progress M-57 que rebalsa de pedazos de la Estación Espacial Internacional (EEI) será desenganchado este martes para ser hundida en el océano Pacífico.

El carguero se desprenderá cerca de la medianoche y cuatro horas más tarde, los pedazos calcinados caerán en el Pacífico a 5.700 kilómetros al Este de Nueva Zelanda, más precisamente entre Oceanía y América del Sur, en el paralelo 40 latitud sur, con profundidades de hasta 4.000 metros.

El aparato pertenece a Rusia que ha hundido durante más de 40 años más de un centenar de aparatos espaciales. Los especialistas sostienen que como los restos se desintegran en las capas superiores de la atmósfera debido a la fricción, no hay riesgo ecológico.

Desde la semana pasada y hasta el lunes, los tripulantes de la Estación Espacial, el cosmonauta ruso Mijail Tiurin, y sus colegas estadounidenses Sunita Williams y Miguel López-Alegría, de origen español, cargaron la Progress con más de una tonelada de desechos y equipos obsoletos. Además, desmantelaron el sistema Kurs, instrumento para el enganche automático de las Progress con la EEI, que una vez devueltos a la Tierra pueden ser utilizados en otros cargueros.

La Progress M-57 es el primer carguero ruso lanzado a la Estación Espacial Internacional este año, y transporta 2,5 toneladas de carga vital entre combustible, agua, oxígeno, repuestos e instrumentos para experimentos. Además, lleva contenedores con alimentos, medicinas y objetos personales para los integrantes de la expedición.