Lourdes tiene dos años y es una de las tantas criaturas que, tras la separación de sus progenitores, se transforma en el trofeo a ganar en medio de los últimos coletazos de lo que algún día fue una relación amorosa. Sin embargo, la gravedad de este caso particular reside en que, de acuerdo a Jorgelina Petraca, la actual pareja de Carlos, el padre de la pequeña, la madre biológica de Lourdes la castigaría físicamente con golpes y quemaduras.

Actualmente la causa recae en el Juzgado de Familia Nº 3, a cargo del Juez Raúl Héctor Tierra y establece hasta el momento un régimen de visitas quincenal de la nena a la casa de su padre. “Nos visita cada quince días y la nena cae toda sucia y con signos de haber sido maltratada”, se lamentó Petraca en diálogo con De Tarde en Tarde. “La madre biológica le pega y el 30 de diciembre pasado le vimos quemaduras de cigarrillos en la espalada y la nena dice que fue la madre cuando se le pregunta”, expuso.

De acuerdo al relato de la mujer, asistentes sociales dependientes del Juzgado de Familia que interviene, comprobaron las lesiones y escucharon de la boca misma de Lourdes que no deseaba vivir con su mamá biológica. Sin embargo, la situación empeoró cuando este lunes a la mañana, desde el Centro de Violencia de Tribunales le pidieron a la pareja que lleve a la niña con su mamá.

“Debíamos presentarnos en el Centro de Violencia pero llamamos porque temíamos que la nena fuese expuesta a una escena de violencia de la madre y nos encontramos con que quieren que entreguemos a Lourdes porque ellos dicen que la madre está bien, pero sólo la vieron una vez”, denunció Petraca.

La pareja del padre de la niña afirmó: “No la vamos a entregar porque la madre le pega. Nosotros no queremos alejarla de ella pero sí exigimos garantías en las condiciones en la que Lourdes va a ser tratada por su madre”, concluyó.