Esta vez no gritó. Tampoco se peleó con otro dirigente, ni criticó al DT de turno. Ni siquiera utilizó palabras subidas de tono. No, esta vez Horacio Usandizaga habló tranquilo, contento. Motivos no le faltan: aseguró estar feliz por la buena racha de Rosario Central, que ganó los primeros cuatro partidos del Clausura. "Siempre insistimos en trabajar en las inferiores, incluso antes de asumir la presidencia del club", aseguró el Vasco, quien evaluó que la juventud del grupo es uno de los puntos clave.

En diálogo con Alberto Lotuf (Radio 2), Usandizaga recordó que, al asumir su cargo, "las inferiores estaban desmanteladas" ya que "el vaciamiento de Central abarcaba el tema deportivo". Puntualizó que en aquel momento "había 270 jugadores y hoy hay más de 900". Aclaró, sin embargo, que los responsables de las inferiores le pidieron paciencia: "Recién rendirán frutos en dos años", adelantó.

El Vasco evaluó que la ciudad y sus alrededores es "una zona rica en capacidad de jugadores, bien alimentados y bien estructurados". Es una región "que abastece muy bien a los dos clubes de Rosario". Y pidió: "Hay que seguir trabajando por ahí".

Consultado sobre el puntaje ideal de Rosario Central, que por estos días está al tope de la tabla de posiciones, admitió: "No lo imaginábamos pero teníamos confianza". Abundó: "De 12 puntos posibles sacar 12 era impensable. Nuestra meta era conseguir 30 puntos, con cuatro fechas ya tenemos 12".

De todos modos, Usandizaga demostró tener los pies en la tierra: "Sabemos que en algun momento Central va a perder. El futbol es así", sostuvo. "Pero entusiasma, a mí y a muchos hinchas, cuando los jugadores entran a la cancha y ponen lo mejor de sí".

¿La clave del actual grupo canalla? "Hay espíritu de sacrificio, solidaridad, se corre y se trabaja mucho. Hay camaradería, un trato cordial, hay un espíritu levantado", planteó.