El antichavismo y sus aliados internacionales anunciaron que consiguieron introducir este sábado desde Brasil el primer camión con ayuda humanitaria para Venezuela. Sin embargo, periodistas enviados especiales tanto de la CNN como de Telesur informaron desde la frontera en cuestión que los camiones aún estaban del lado brasilero.

“Ya tenemos el primer camión de ayuda humanitaria en territorio venezolano proveniente de la frontera con Brasil”, informó Voluntad Popular (VP), el partido del líder opositor Juan Guaidó.

Por esa situación de tensión en las fronteras, hubo corridas y disturbios. La Guardia Nacional Boliviariana reprimió con gases y balas de goma los intentos de ingresar los camiones por la frontera cerrada.

La ayuda en las fronteras

Asimismo, poco después, Guaidó encabezó el acto en el que 14 camiones con alimentos, remedios y artículos de higiene se pusieron en marcha en Cúcuta (Colombia) con el objeto de ingresar a las localidades fronterizas San Antonio, Ureña y Boca del Grita, en el estado venezolano Táchira.

Guaidó, quien se subió a uno de los camiones, estuvo acompañado en ese momento por los presidentes de Colombia, Chile y Paraguay (Iván Duque, Sebastián Piñera y Mario Abdo Benítez, respectivamente) y por el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el uruguayo Luis Almagro.

Cada uno de esos camiones carga 20 toneladas de mercadería, según la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres de Colombia (Ungrd). Así, se puso en marcha el transporte de 280 de las 600 toneladas de productos almacenados en Cúcuta, según fuentes del antichavismo.

El operativo para ingresar ayuda humanitaria desde Cúcuta (Colombia) y Paracaima (Brasil) iba a ponerse en marcha a las 10, pero sufrió demoras a raíz del despliegue militar dispuesto por el gobierno chavista para impedir la iniciativa.

En ese contexto se produjeron diversos incidentes, como la represión por parte de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militar) en Ureña y Santa Elena de Uairén, ciudades venezolanas que limitan respectivamente con Cúcuta y Paracaima.

En Santa Elena, indígenas de la etnia pemón, que este viernes se enfrentaron con tropas de la GNB con un saldo de al menos dos muertos y una veintena de heridos, retuvieron este sábado a 41 efectivos de esa fuerza.

Luego, la GNB reprimió a ciudadanos que reclamaban el paso de los cargamentos de ayuda, según reportó el director de la ONG Foro Penal Venezolano (FPV), Alfredo Romero.

En tanto, en la frontera con Cúcuta también hubo represión por parte de la GNB, y cuatro efectivos de esta fuerza que pasaron por la fuerza a la ciudad colombiana y declararon su adhesión al gobierno interino de Guaidó.

Posteriormente, las tropas de la GNB fueron retiradas y reemplazadas por agentes femeninas de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), según informó el diputado antichavista Carlos Valero.

Cúcuta, en el departamento colombiano Norte de Santander, está vinculada con Venezuela a través de tres puentes: Tienditas (terminado en 2016 y nunca inaugurado) y Francisco de Paula Santander la conectan con Ureña, y Simón Bolívar, con San Antonio del Táchira.

Además, los antichavistas no descartaban recurrir a un cuarto puente en la zona, La Unión, que une a Puerto Santander, en Colombia, con la venezolana Boca del Grita.

El gobierno chavista anunció anoche el cierre de esos cuatro puestos fronterizos, tras haber clausurado la frontera terrestre con Brasil y el puente aéreo con la isla holandesa Curazao en los días previos.