Por lo general, la edad media de los pasajeros que viajan en crucero está comprendida entre los 40 y los 50 años, una edad que, aunque todavía se tiene buena salud, a veces el cuerpo no tiene tanta resistencia como en el caso de las personas más jóvenes. Otra característica que se encuentra es que son muchas las personas mayores que se aventuran a vivir largos viajes de más de una semana, aumentando por lo tanto la posibilidad de alguna enfermedad o afección.

El problema comienza cuando no existe un control por parte del pasajero a la hora de degustar la comida, comiendo demasiado y ocasionando, por lo tanto, que el tránsito intestinal no funcione como es debido, o sufra indigestiones que lo hagan estar en cama o tener sudores fríos. Estos suelen ser uno de los problemas más habituales, como también lo son las ingestas de alcohol debido al todo incluido, haciendo que la persona tenga que pedir algún fármaco para eliminar esta sensación, según publica saludalia.

Aunque cada vez los barcos cuentan con una tecnología que hace que el vaivén de las olas se sienta menos, es habitual que muchos se sientan fatigados o con mareos en algún momento del viaje, por lo que piden en la enfermería o al responsable una pastilla para el mareo.

Es muy poco frecuente que haya que utilizar otro tipo de medidas, y en estos casos, como caídas o problemas mayores, el personal sanitario estipulará las medidas que hay que seguir, por si puede ser tratado dentro del barco o debe buscarse un medio para que pueda ser atendido en un centro sanitario terrestre (fuente).

Recomendaciones al viajar en cruceros

Existen varias recomendaciones para la salud que debes tener en cuenta cuando vas a viajar en crucero, entre ellas tenemos tener el calendario de las vacunas en regla, como también en caso de personas que sufran del corazón o que cuenten con un tipo de enfermedad importante, que se le facilite al personal sanitario si hiciese falta el historial médico.

Las personas con alergias o con algún tipo de necesidad deberán avisar en todo momento, para evitar males mayores, debiendo en caso de alergias a ciertos alimentos, contar con esto, hablando con los responsables para que la estancia en el crucero sea la mejor posible.

Es importante que, en el caso de medicamentos, puedas llevarlos en los envases originales, siempre y cuando no sean de cristal, puesto que en los barcos no se puede entrar con objetos de este estilo ni botellas, pero puedes llevar contigo las recetas para que el médico pueda dictaminar qué es lo que se está tomando en caso de una enfermedad a bordo del barco.

La prevención es la mejor recomendación, por eso, recuerda llevarte todo lo que pueda hacerte falta, como también mucha protección solar, ya que es posible que el Sol dé más fuerte en alta mar.