Un joven delincuente que arrebató el celular a la hija de un policía fue retenido por vecinos y después recibió una paliza. Ya esposado y dentro de un auto particular, también sufrió trompadas, rasguños, golpes en los genitales y patadas en la cara. Todo ocurrió en presencia de un policía que hizo poco y nada para contener las agresiones. El hecho tuvo lugar en Tucumán.

El video de la golpiza fue filmado por un vecino, según informó Clarín. Enfocó el rostro del ladrón adentro del móvil policial, ya esposado. En plena grabación, una mujer abrió la puerta y a los gritos comenzó a atacar al maleante.

Cuando el asaltante intentó defenderse, un policía lo tomó del pelo, le pegó en el rostro y le dijo: "Quieto con la señora". Se sumó otro vecino, quien pateó la cara del ladrón.