El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, pidió este lunes a la comunidad internacional que actúe de manera "urgente" para impedir "mayor derramamiento de sangre" en el país centroamericano, declarado en estado de sitio por 45 días por el gobierno de facto.

Zelaya, refugiado desde hace una semana en la embajada brasileña en Tegucigalpa, calificó de "criminal" la medida de excepción y estimó que llevará al país "al abismo económico y político".

En declaraciones a la emisora mexicana W Radio, recogidas por la agencia de noticias Ansa, el mandatario manifestó su "indignación por la tragedia que está viviendo" Honduras y lanzó un "llamado urgente a la comunidad internacional para que actúe con la mayor diligencia posible para evitar un mayor derramamiento de sangre".

Para Zelaya, la declaración del estado de sitio por 45 días demuestra que los golpistas "nunca han pretendido llevar a cabo las elecciones", previstas para el 29 de noviembre.

El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, definió en el marco de una reunión extraordinaria del organismo en Washington para tratar la crisis hondureña, que el estado de sitio es "incompatible" con el proceso electoral.

El presidente constitucional hondureño asguró que permanecerá en la embajada brasileña dispuesto a "enfrentar cualquier riesgo con tal de que Honduras retorne a la paz y los golpes de Estado no se repitan nunca más en ningún lugar de América".

Fuente: Télam