Luego del acto oficial por un nuevo aniversario de la declaración de Rosario como ciudad, Pablo Javkin, le subió el tono al reclamo al gobierno nacional por la desigualdad en el reparto de recursos y ya directamente por el abandono en algunos aspectos. Como otros intendentes, el rosarino refrendó el Grito federal, la miniliga de gobernadortes que impulsan Maximiliano Pullaro, Martin Llaryora, Ignacio Torres, Claudio Vidal y Carlos Sadir.
“Acá la vaca viva pone todo el tiempo, la Vaca muerta es la promesa, pero hay uno solo que come la vaca”, advirtió en un juego de palabras sobre la concentración de recursos en el Aréa Metropolitana de Buenos Aires (el único que come la vaca), el interior productivo (la vaca viva que pone todo el tiempo) y la explotación energética en la cuenca neuquina.
Para el mandatario municipal, el Grito federal fue “una decisión muy valiente” en la cual distintos líderes fueron capaces de pensar más allá de sus diferencias ideológicas.
“Nosotros (los intendentes) conocemos como nadie que, más allá de las tradiciones partidarias, los problemas son los mismos: la decisión de Nación de invertir siempre en Buenos Aires”.
Finalmente, señaló, a propósito de los vetos presidenciales al aumento a jubilados y la emergencia en discapacidad: “La Argentina de los vetos no resuelve nada. Si (el gobierno nacional) tiene alternativas, que presente alternativas. Me gustaría que discutamos lo que hacemos los municipios cubriendo el abandono de las políticas nacional en Salud y discapacidad y cómo encontramos mecanismos de financimiento que no alteren el equilibrio fiscal. Todo está planteado desde el posicionamiento político, de redes, todo es una guerra”.
