Científicas del INTA y del Conicet lograron un importante avance para el desarrollo de un test que permita detectar en muestras de órganos, orina o sangre la bacteria que causa la leptospirosis, una de las enfermedades zoonóticas (pasa de animales a humanos) más extendidas a nivel mundial.

"Al considerar que la leptospirosis es una enfermedad zoonótica de distribución mundial y que no sólo provoca grandes pérdidas a nivel económico sino también la muerte en humanos si no es detectada a tiempo, es de suma importancia disponer de herramientas que permitan la detección directa del patógeno tanto para el diagnóstico como para el screening de individuos afectados", afirmó la licenciada Vanina Saraullo, una de las investigadoras del proyecto.

Saraullo realiza esta investigación en el marco de su beca doctoral, dirigida por la doctora en Veterinaria Bibiana Brihuega, en el Laboratorio de Leptospirosis del Instituto de Patobiología Veterinaria (IPVET-UEDD) que depende del INTA y del Conicet.

Lo que Brihuega y su equipo investigaron fue qué parte de la bacteria que causa esta enfermedad podía servir como "blanco" para ser identificada por un test molecular por reacción en cadena de la polimerasa (PCR), como los test que permiten la detección del coronavirus que se usan actualmente para diagnosticar Covid-19.

Tras varios análisis, Brihuega y su equipo eligieron como blanco para la detección una parte de la bacteria Leptospira (la región 3´del gen LigB) que codifica una proteína que contribuye de manera significativa a su virulencia durante los primeros estadios de la enfermedad.

"Elegimos esta región del gen debido a que se encuentra exclusivamente en especies patógenas y, además, nunca antes fue usada para el diagnóstico", puntualizó Saraullo.

La PCR LigBct resultó en un 100 por ciento de positividad a las muestras de leptospiras patógenas en suero, sangre y orina de bovinos.

Las investigadoras también analizaron la especificidad analítica utilizando ADN de diferentes patógenos que comparten sintomatología similar a la leptospirosis. "El resultado de la PCR fue negativa para todas las muestras, lo que demuestra la especificidad de nuestra herramienta", destacó.

Por otra parte, las investigadoras comprobaron que resultó más sensible la detección de trazas de ADN de las bacterias en el suero en comparación con sangre y orina.

"Nuestro próximo paso es poder determinar la especificidad y la sensibilidad diagnóstica de la técnica", indicó Saraullo.

Y agregó: "Tenemos como objetivo realizar más estudios debido a que en la actualidad no existe una técnica molecular de diagnóstico gold standard para la detección de esta importante zoonosis".

La expectativa de las investigadoras es que se utilice como una herramienta complementaria para el diagnóstico de la leptospirosis.

Del avance también participaron Sylvia Grune Loffler (codirectora de la tesis de doctorado), Monica Florin-Christensen, (codirectora de beca), Olivia Watanabe (becaria Doctoral del Conicet), Micaela Hamer (becaria Doctoral del Conicet), y Mara Martínez, investigadoras del Instituto de Patobiología Veterinaria de INTA Castelar (IPVET-UEDD INTA-Conicet).