El juez que lleva la convocatoria de acreedores de Vicentin, Fabián Lorenzini, habilitó la feria judicial para verificar los créditos que presentaron los acreedores con una resolución que dejó a los bancos extranjeros como principales rectores del futuro de la malograda agroexportadora.

En líneas generales, y siguiendo los criterios que recomendó la Sindicatura, el juez pesificó las acreencias comerciales (de acopios y productores que le vendieron granos) al tipo de cambio oficial de la fecha de presentación del concurso ($65 el dólar) y sólo en dejó en dólares los créditos que le otorgaron los bancos.

Esa decisión se ajusta a la normativa concursal, pero venía siendo objetada (hasta con movilizaciones) por los acreedores comerciales ya que en la práctica, aseguran, significa una fuerte licuación a favor de  Vicentin cuando el mercado de granos, sostienen, es un negocio dolarizado. Para tener una idea, el dólar oficial hoy cotiza a $85 y al momento de cobrar es muy factible que el peso argentino esté bastante más devaluado.

Tres de cada cuatro acreedores de Vicentin son productores, al 92% de ellos les pesificó la deuda y se las licuó en un 40%, y de eso ofrecieron pagar el 40% en 10 años, es decir que la licuación es del 85%”, le dijo a Rosario3 Gustavo Feldman, abogado de Grassi SA (uno de los principales acreedores comerciales). Las principales empresas del agro a las que les pesificaron acreencias fueron: ACA ($5.425.588.948), Commodities SA ($2.014.848.580,00 y u$s16.170.995,00 ) y Agronegocios Jewell ($218.614.218,00 US$1.955.307)

Esta decisión –más allá del fuerte impacto financiero que tiene en muchos acopios y cooperativas- tiene también un alto impacto en el futuro de la aceitera. Es que a la hora de sentarse a negociar una salida, los acreedores comerciales (al ser pesificados) quedan con menor influencia frente a los acreedores financieros. Es que los bancos (a los extranjeros le deben u$s500 millones y al Banco Nación $300 M) quedaron -muy por lejos- como los principales acreedores ya que la deuda que tenia con el agro, que estaba contabilizada en dñolares en torno a los u$s 350 millones al pesifcarse ahora rondará la mitad de ese monto.

El tema es que la presencia de los acreedores comerciales es clave para conseguir los granos que se necesitan para volver a poner en marcha la compañía. Sin su participación es difícil que la empresa recupere giro comercial para pagar sus compromisos. Y es que es complicado, incluso con nuevos dueños, que productores y acopiadores que no hayan quedado enganchados en el default le entreguen granos a la empresa.

La Justicia convalidó que Vicentin le devuelva créditos en dólares a sus asociados (u$s37M a Vicentin Paraguay y u$s24M a Renova) y le pague en pesos a los productores agropecuarios

Para los acreedores financieros (tenedores de deuda dolarizada) aparece como práctico la venta para recuperar sus dólares. y por eso el escenario de desguace suma puntos con la decisión que tomó el magistrado de Reconquista.

Otro punto fuerte de las decisiones del juez fue rechazar el pedido de los accionistas y ex directivos de dolarizas sus acreencias con las firmas, lo que hubiese activado otra polémica. Además, Lorenzin. nombró como sub-interventor al abogado Guillermo Nudenberg.

Se admitieron 1.290 acreedores granarios resultando 111 admisibles en dólares y 1.266 en pesos, por lo que  equivale a una suma total de $ 23.956.545.784,63  y U$S31.211.979,47.

ACREEDORES COMERCIALES

“Se ha realizado un especial esfuerzo, a los fines de analizar la posibilidad de admitir la totalidad de las acreencias granarias en dólares al momento de la apertura concursal), conforme fuera peticionado por numerosos acreedores en el momento de sus solicitudes de verificación tempestiva de créditos. Pero hemos encontrado importantes escollos para ello en la propia ley concursal, razón por la cual no ha sido posible admitir su aplicación con la extensión pretendida”, señaló el juez. Los que se opongan tendrán hasta el 5 de marzo para presentar sus pedidos de revisión.

Los criterios para definir la moneda en la que se contrajeron los pasivos y las tasas de interés fueron los siguientes:

x) Saldos Acreedores en cuenta corriente:  en pesos.

x) Mercadería en depósito:  Siguiendo la recomendación de la Sindicatura, los certificados de depósitos serán convertidos en pesos en base a la cotización de granos a la fecha de la presentación del concurso y conforme al precio de la Bolsa de Comercio de Rosario.

x) Boleto de Compra-Venta a fijar:  Se tendrá en cuenta la moneda en la cual se pactó el precio a fijar. “Sin perjuicio de que se haya establecido dólares como la moneda del precio a fijar, en los casos en los cuales el acreedor solicitó verificación en pesos será esa la moneda de verificación”, señala.

x) Boleto de Compra-Venta de granos a precio hecho: Se tendrá en cuenta la moneda en la cual se estableció.

x) Comisiones  por corretaje: en pesos

x) Operaciones con laudo arbitral: “ Se verificarán los laudos arbitrales que se encuentren firmes y ejecutoriados; Aquellos procesos laudatorios en trámite no comparten la naturaleza jurídica de los ya laudados y firmes”.

“En todos los casos antes mencionados, para el caso de la verificación en moneda extranjera, serán calculados en moneda de curso legal a la fecha de la presentación del informe del Síndico al solo efecto del cómputo del pasivo y de las mayorías”, sostuvo el juez.

En la resolución, el juez sostiene que han concurrido tempestivamente a verificar sus créditos, un total de 1321 acreedores granarios de los cuales 1065 formularon su pedido en Pesos, mientras que otros 390 lo han hecho en dólares (el total de en ambas monedas totaliza 1.455 acreedores concurrentes, dado que 134 de los mencionados formularon pedidos en ambas monedas). Esto representó una suma total de $ 19.172.796.333,23 y U$S 166.360.452,56.

Luego de su análisis por parte de la Sindicatura Concursal, admitiero. 1290 acreedores granarios resultando 111 admisibles en dólares y 1266 en pesos, por lo que  equivale a una suma total de $ 23.956.545.784,63.- y U$S31.211.979,47. “Como primera reflexión surge que, estamos frente a una categoría de acreedores muy importante en cantidad de créditos admitidos: Sobre un total de 1727 acreedores verificados, 1290 pertenecen a la categoría de GRANARIOS, es decir que representan el SETENTA Y CUATRO COMA SESENTA Y NUEVE PORCIENTO (74,69%) del total de los acreedores verificados”, sostiene.

El juez dedica varios párrafos en los que muestra que analizó con atención los numerosos planteos que recibió de los acreedores comerciales para que les dolaricen las deudas con atención a que se trata de un negocio en la que las operaciones se pactan reflejadas en cotizaciones en moneda dura. Y si bien reconoció la particularidad dolarizada del mercado de granos, terminó inclinándose por ajustarse a la normativa.

Sobre un total de 1727 acreedores verificados, 1290 pertenecen a la categoría de granarios, es decir que representan el 74,69% del total de los acreedores verificados.

“Nuestra ley concursal no ofrece (a nuestro modesto entender), herramientas que tengan la flexibilidad necesaria para receptar el supuesto que venimos analizando. Avanzar en el reconocimiento de acreencias en moneda extranjera en el caso de los créditos granarios en su totalidad, implicaría desarticular el sistema concursal, con el muy probable resultado de prolongar indefinidamente un debate judicial sumamente destructivo”, dijo el juez. “La admisión de la totalidad de los créditos granarios en dólares implicaría el reconocimiento de una diferencia de valor, exclusivamente en favor de quienes hubieran entregado granos en detrimento del resto de los acreedores también monetizados en pesos”, señaló Lorenzini.

“Los acreedores granarios en pesos y la concursada, pueden explorar opciones que involucren la recomposición de los créditos granarios en pesos, como parte de la construcción de un acuerdo concordatario, viable para ambos. Tal como ya se dijo en anteriores sentencias, el conflicto seguirá latente si no media el involucramiento y diálogo entre los que se reconocen como protagonistas del problema y portadores de una llave para su resolución. Sería recomendable la construcción de un plan de salida de la crisis, viable para la empresa y con la aptitud de atender estos créditos, monetizados en pesos de una manera razonable, diferenciándolos positivamente de los granarios que se monetizaron en dólares”, dijo.

Planilla con parte de los acreedores financieros

ACREEDORES FINANCIEROS

Por el lado de las acreencias financieras, Lorenzini sostuvo que “debemos ponderar que en la mayoría de los casos analizados, estamos en presencia de mutuos o contratos financiaciones de diversa denominación, realizados en dólares estadounidenses, con “fondeo” externo y sujetos a específicas condiciones pactadas en cada caso en particular, dada la magnitud económica de la concursada, como así también sometidos a las reglas estables de cada mercado de capitales, pautas de gobierno societario y de los entes reguladores”.

En materia de intereses compensatorios, para los créditos verificados en moneda extranjera se utilizará la tasa LIBOR4 + 4 puntos adicionales (máximo), en coincidencia con lo recomendado por la Sindicatura.

“Se tendrá presente la causa del crédito, a los efectos de establecer la moneda en que fue pactada cada obligación dineraria, por cuanto muchos bancos nacionales realizaron operaciones en dólares estadounidenses pero las acreditaciones fueron concretadas en pesos al cierre de cambio con el BCRA. No obstante ello, tratándose de pre-financiaciones para exportaciones deviene indiscutible la existencia de un obligación de dar sumas de dinero pactada en moneda extranjera, por su propia naturaleza jurídica”, sostiene la resolución.

Es por eso que los bancos que le prestaron para operaciones de caja, como el Nuevo Banco de Santa Fe, Banco Macro, el Nuevo Banco de Entre Ríos, Itaú y Santander quedaron con sus acreencias pesificadas, pero a quienes le prefinanciaron exportaciones se las validaron en dólares como el Banco Nación (u$s296M), Bapro (u$s14M), Ciudad (u$s5M), Hipotecario(u$s12), Bice (u$s5M)

Sobre el impago del Fideicomiso Vicentin Exportaciones VII, se aclara que “los legitimados para percibir dichos créditos serían los titulares de aquellas acreencias pero solamente contra el patrimonio fiduciario. No así contra el patrimonio particular de la sociedad fiduciante. A tenor del cual, los créditos pretendidos por VDF reclamados por Banco Industrial SA y Aval Ganadero SGR , no serán admitidos”.

ACCIONISTAS Y DIRECTIVOS

Un capítulo para la polémica de la verificación de créditos eran los accionistas y directores que pedían la verificación de acreencias con la empresa en dólares.  “Los pagos efectuados (tanto en concepto de dividendos o pago por honorarios) fueron abonados y asentados en pesos. Ello surge también de las actas de directorio, de asamblea y estados contables analizados. En razón de ello, siguiendo la opinión de la Sindicatura, los créditos reclamados serán verificados en pesos”, decidió el magistrado desactivando así un foco de conflicto que sería que se validen en dólares acreencias de los dueños y en pesos las del campo. Al único de los accionistas al que le rechazaron la verificación de créditos fue al ex director financiero Roberto Gazze, por no presentar la documentación correspondiente.

Con respecto a la acreencia que presentó Vicentin Paraguay, el juez dio por acreditado los saldos deudores por venta de soja con la documental que se acompaña por lo que se verificará el crédito solicitado validando así una acreencia por u$s 37M. Y además, valida una deuda con Renova (de la que Vicentin es todavía socio minorista) por u$s 24M, pero su monto no será tenido en cuenta para la conformación de las mayorías al momento de promover el acuerdo preventivo. Que se admita que Vicentin deberá devolver dólares a dos de sus empresas asociadas, pero le devolverá pesos a los productores es otro punto de polémica.

Finalmente, en cuanto a los acreedores del rubro “bienes y servicios”, la mayor parte quedaron “pesificados”, con excepción de aquellas empresas que prestaron servicios tarifados en moneda extranjera, como es el caso de ADM (con una deuda verificada de 2.605.618 dólares), Cargill (1.732.751), LDC (1.229.292) y United Gran Corporation (274.299), entre otras.