1-Justo Villar: “¡Ex-tra-or-di-na-rio arquero!” En mi vida vi volar a un arquero con tanta fuerza y potencia de piernas como Justo. Le pateábamos en los entrenamientos, volaba de palo a palo y no había forma de hacerle un gol, era increíble lo que atajaba. Jugar con él atrás era un respaldo espectacular, fue clave tenerlo para lograr el campeonato del 2004, nos salvó mil veces. Muy pocas veces me sentí tan seguro con un arquero, como con Justo Villar”.
2-Sebastián Domínguez: Un futbolista muy inteligente. En Sarandí ante Arsenal, con Seba casi nos agarramos a trompadas. Me gustaba y pretendía jugar con un equipo corto, él retrocedía mucho y quedaba a 5 o 6 metros atrás mío. Levantaba la mano y lo veía en el fondo, me quería morir y lo quería matar. En el entretiempo no cruzamos mal, lo agarré y le dije; “así no podemos jugar, si vas a tener miedo no vamos a llegar a nada”. Al ser un tipo tan inteligente, rápidamente lo entendió y me respondió; “te voy a hacer caso, hacemos lo que vos decís, ahora si perdemos, es por tu culpa”. Después de ese episodio arrancamos y no paramos más. Logramos una muy buena sincronización de juego y entablamos una hermosa amistad”.
3-Juvenal Olmos: “Un buen DT. Estuve en desacuerdo con él en el partido de ida contra Rosario Central por la Sudamericana, debió arriesgar más. Fue muy loco como lo conocí a Juvenal. Estaba suspendido, Newell's jugaba de visitante ante Olimpo y Eduardo Lopez me invitó para ir a ver el partido a Bahía Blanca en su avión privado. En el aeropuerto previo al viaje me encontré sorpresivamente con Olmos. El presidente me lo presentó, lo saludé y subimos al avión. Lopez empezó a fumar antes de despegar, por el humo no se veía nada y no pude cruzar ni una palabra en todo el viaje con Juvenal. Sin hablarnos desde Rosario hasta Bahia Blanca, una cosa de locos (risas)”.
4-Ernesto Corti: ¡Un grande Carucha! Excelente persona, cuando llegué a Instituto era uno de los jugadores más importantes del plantel. Me recibió muy bien y nunca me hizo sentir quien era por su trayectoria. Nos hicimos amigos y terminamos concentrando juntos. Viví un hecho histórico de su vida como futbolista, fui el primero en saber que colgaba los botines. Jamás me voy a olvidar, estábamos de pretemporada en Carlos Paz, concentrábamos en un hotel de una estrella y media, en el placard vivía Drácula (risas). Era pleno verano con una temperatura de 40 grados y se cortó la luz a las dos de la tarde. Carucha se levantó de la siesta todo transpirado y muy fastidiado me dijo; “ya está, no puedo estar acá, no juego más”. Llamó por teléfono a su esposa, le pidió que lo venga a buscar, se despidió del plantel, del cuerpo técnico y se fue. Literalmente no jugó más, dejó el futbol profesional. Eso sí, por ese hotel, ni por la puerta volvió a pasar (risas)”.
5-Américo Rubén "Tolo" Gallego: “Un tipo puro y sano. Muchos dicen; “el Tolo es un gran entrenador”. Para mí y no creo que se enoje, el Tolo en realidad, es un gran manejador de grupos. No es un DT que va a preparar determinada estrategia, ni un parado táctico específico para un partido. Él maneja el vestuario, tiene mucha cancha, sabe con quién hablar, sabe cuándo ajustar y cuando no. En Newell’s campeón 2004, vivimos un momento difícil cuando perdimos con Almagro, el lunes regresamos a los entrenamientos y él nos dijo; “acá no habla nadie, a la prensa déjenmela a mí, la enfrento yo”. Ese tacto, ese olfato y esa capacidad para tener siempre bien al plantel, lo llevaron a salir campeón en varios clubes. El Tolo logra que el jugador el domingo se tire de cabeza por él”.
6-Patricio Hernández: “Un filósofo del futbol por donde se lo mire. Me dirigió en Banfield, sabe mucho de táctica, realizaba entrenamientos de cuatro horas pero nunca pudo aceitar y hacer funcionar al equipo. Tengo una anécdota muy graciosa con Patricio, espero no se moleste por lo que voy a contar. Por la Copa Libertadores jugábamos en México ante América, en la charla técnica previa al partido, iba enumerando de a uno a los titulares en su correspondiente puesto, cuando llega a los delanteros, menciona como dupla de ataque, a Barrales y a Lucchetti el arquero. Pensamos que se había equivocado y al toque lo corregimos; “Profe… Lujambio en lugar de Lucchetti que va al arco”. Con un tono elevado nos ratificó; “Lucchetti va de nueve” y dio por terminada la charla. No lo podíamos creer, no lográbamos salir del asombro. Si bien, Lucchetti es un arquero que juega bien con los pies, nunca había jugado de delantero y era una locura ponerlo por primera vez en un partido por Copa Libertadores. Le tuvimos que pedir a Pablo Sanchez que era su ayudante, que hable con él e intente hacerlo dar marcha atrás con esa insólita decisión. Vitamina accedió y habló con Patricio. Salió de la reunión, se acercó a nosotros y nos dijo; “no saben lo que me costó, pero lo convencí, ataja Lucchetti y Lujambio será el nueve”. Todo el plantel y el resto del cuerpo técnico, nos miramos y respiramos aliviados (risas)”.
7-Ariel Ortega: “¡Un fenómeno! Ariel le dio un plus extra al plantel de Newell’s campeón 2004. Cuando llegó al club nos generó una motivación especial, todo lo que él traía, figura mundial, mucha prensa, tapas de los diarios, ver todo lo que movía hasta cuando bajaba del micro y como repercutía en los rivales, fue muy bueno para el grupo y lo supimos capitalizar muy bien. Llevaba un tiempo largo sin jugar pero no se notó el párate inactivo, demostró que no estaba retirado. Nunca vi un futbolista con el freno, enganche y arranque del Burrito”.
8-Juan José López: “Uno de los mejores entrenadores que tuve en mi carrera. Es un tipo 100% del futbol, un estratega que le gusta saber todo del rival para preparar su equipo. Con Jota Jota tengo una excelente relación, me dirigió en dos oportunidades en Instituto y dos en Talleres. Lamento mucho lo que le pasó en River”.
9-Ricardo Gareca: “Al Tigre lo ubico en el escalón más alto de los entrenadores que me dirigieron. Entiende todo del futbol. En Talleres se apoyó siempre en los futbolistas más grandes. Perdimos cuatro partidos seguidos, le pedimos a Ricardo que nos saque del equipo para ayudarlo y descomprimirle la situación, caliente nos respondió; “están locos, van a seguir jugando, me respaldo en ustedes y sino levantamos, me voy yo”. Salimos de ese vestuario a bancarlo a muerte y llegaron una tras otra las victorias. Es un DT al que siempre le debes algo, salís a jugar dejando todo y un poquito más por él. Estoy en contacto permanente con el Tigre, me alegra muchísimo como le está yendo con la Selección de Perú. Un tipo extraordinario, lo quiero mucho”.
10-Alberto Pascutti: “Un tipo de barrio, se la bancaba adentro y afuera de la cancha. Fuimos compañeros el All Boys, él con casi 34 años y yo muy joven. Nos ayudó a los más chicos, nos aconsejaba, nos apoyaba y hasta nos llevaba a comer a su casa. Un gran diez, jugaba realmente muy bien. En All Boys la rompió y fuimos campeones. El Beto fue la figura indiscutida de aquel equipo”.
11-Mario Jardel: “¡Terrible goleador! Ganador del balón de oro en Europa, cuando jugué en Gremio, me encontré con posters de Jardel por todos lados. En Newell's no tuvo la adaptación necesaria. La ideal del Tolo era llevarlo despacio, no apurarlo, pero en un entrenamiento previo al inicio del torneo anduvo muy bien. Hizo tres golazos, tenía un guante en la cabeza y clavó en los tres goles la pelota en un ángulo. Esa contundencia lo llevó a ser titular en el primer partido ante Velez en el Coloso. No jugó bien, la gente lo reprobó, no levantó nunca y jamás pudo alcanzar el nivel esperado. Un personaje amable, buena onda, una lástima que no le haya ido bien en Newell’s”.



