Luego de la asamblea sin quórum para el oficialismo de Newell’s –a la cual no concurrió el presidente Eduardo Bermúdez–, la versión sobre que el mandamás leproso iba a dar un paso al costado comenzó a circular fuertemente. El sábado se esperaba su presencia en el estadio para el encuentro por la fecha 21 pero tampoco asistió y eso hizo redoblar la apuesta sobre la posibilidad que en esta semana iba a presentar la renuncia.

Si eso llegase a ocurrir, generaría un movimiento interno en la estructura dirigencial en la cual no está muy claro qué miembros lo seguirían. Lo cierto es que en el caso que Bermúdez renuncie o pida licencia, el cargo pasaría al vicepresidente primero, Juan Matías, quien tiene una marcada diferencia con su par el vicepresidente segundo Cristian D’Amico –no tiene los años de socio necesario para ser presidente–, quien es uno de los hombres de Bermúdez y que no se sabe qué postura tomaría.

Sobre este tema, uno de los directivos influyentes fue claro: “No vamos a pedirle a Bermúdez que se quede, no se va a reunir con nosotros, no pedimos reunión ni él quiere reunirse con nosotros”.

Y fue más allá: “Con Bermúdez no tenemos contacto ninguno de los dirigentes desde hace 25 días, él no habla con nadie, está ausente, se maneja solo y si quiere irse no nos vamos a oponer ninguno de los miembros de la comisión, esto te lo aseguro”.

En otro orden, la citada fuente agregó sobre el presidente: “No creo que se vaya, no le conviene, no quiere, no tiene ganas, y el que le puso en la cabeza esa idea se equivocó”.

Así están las cosas por el parque Independencia, el panorama en Newell's es complejo, ni el triunfo frente a Tigre dio tranquilidad a la institución.