Después de la aparición del covid-19 en Wuhan, China, y con el crecimiento de los contagios, el virus sufrió mutaciones y se detectaron cepas con características particulares. Hoy, la variante Delta, que se descubrió en India, es la nueva preocupación global en materia de salud y fue detectada en más de 140 países.

La Organización Mundial de la Salud la clasificó como variante “preocupante” ya que se caracteriza por cumplir con los criterios de mayor transmisibilidad, aumento de la virulencia o cambio en la presentación clínica de la enfermedad, y disminución de la eficacia de las medidas sociales, o de los medios de diagnóstico, las vacunas y los tratamientos disponibles. 

Hoy en Argentina la cepa Delta no es predominante. La ministra de Salud nacional Carla Vizzotti expresó que “fue un gran logro retrasarla hasta ahora” pero que “es imposible en el mundo que se contenga”. En Santa Fe se registraron 9 casos de viajeros y la ministra de Salud de Santa Fe, Sonia Martorano, expresó que, si bien en la provincia la foto epidemiológica hoy “es excelente”, la variante Delta del coronavirus “está a la vuelta de la esquina” y por eso solicitó continuar con los cuidados y avanzar con la campaña de vacunación.

Ahora: ¿qué se sabe de esta nueva cepa, por qué tiene en alerta a los sistemas de salud y qué se debe tener en cuenta? Rosario3 dialogó con Fernanda Ferrer, infectóloga (MP 17596) miembro del equipo de Epidemiología de Santa Fe y quien preside la Sociedad de Infectología de Rosario, para conocer en detalle la variante.

—¿Qué es la cepa Delta y por qué hizo crecer los niveles de alarma a nivel mundial?

—Es una cepa que sumó mutaciones a la estructura inicial, y por eso se transformó en una nueva variante. Se la considera una variable de preocupación, porque tiene tres características fundamentales: mayor transmisibilidad, la posibilidad de reducir la inmunogenicidad de las vacunas y es la causal de brotes actuales en el mundo.

—¿Cuánto más contagiosa es que otras cepas y qué puede provocar?

-La cepa es más contagiosa porque tiene mayor afinidad por los receptores en el ser humano, y se detectó que tiene una mayor carga viral y un periodo de incubación más corto que las otras cepas. Significa que llega antes a una mayor carga viral y transmite el virus más fácilmente. Tiene una contagiosidad parecida a la varicela. Además, en el mundo se han observado “supercontagiadores”, que son aquellas personas que pueden contagiar al 80% de la población, aún en espacios abiertos. Vamos a un ejemplo práctico: si una persona que tenía covid estaba en una reunión con 10 personas, antes podía contagiar a 2, y ahora con esta variante, contagiaría a 5.

—¿Los síntomas pueden ser distintos al de las otras variantes?, ¿puede ser más agresiva?

—Pueden ser los mismos que producen las otras variantes que tuvimos y tenemos en circulación, pero estamos detectando que el dolor de cabeza, el dolor de garganta y la rinitis son más frecuentes. La anosmia (pérdida del sentido del olfato) que se dio podría ser menos frecuente que para las otras cepas. Hay que tener en cuenta que puede dar febrícula o tos, no es una cepa que da un cuadro totalmente diferente, si no que puede haber diferencias en cuanto a la frecuencia de la presentación de esos síntomas y no necesariamente va a producir una enfermedad más severa que con las otras cepas

—¿Cómo afecta la cepa Delta a quienes no están vacunados y a los pacientes con comorbilidades?

—Según la experiencia que está teniendo el resto del mundo con respecto a Delta, el 90% de los pacientes que están hospitalizados no están vacunados. La mayor hospitalización y muerte se registra en pacientes no vacunados. También se registró un cambio epidemiológico con mayor afectación de jóvenes. Europa hoy tiene mayor afectación de personas que están en el rango de los 20 años. En cuanto a las comorbilidades esos pacientes siguen siendo los que más se hospitalizan, son frecuentes las enfermedades crónicas, cardíacas o la diabetes. Por eso estamos haciendo hincapié y avanzando en vacunar con dos dosis a los mayores de 60 (en Santa Fe llega al 75% de los pacientes), a quienes tengan comorbilidades, pero también a los jóvenes, porque si el virus encuentra un nicho de personas susceptibles va a seguir circulando y hay mayor probabilidad de que siga mutando y de que aparezcan nuevas variantes. Es fundamental que los jóvenes se acerquen a vacunarse, tanto mayores de 18 años como entre 12 y 18 con factores de riesgo. Quienes aún no se anotaron pueden hacerlo en la página oficial. 

—¿Qué hace que el virus mute y que aparezcan nuevas cepas?

El coronavirus es un virus que tiene una alta tasa de mutación, pero se sabe que en contextos en donde hay alta transmisibilidad, baja adhesión a los protocolos sanitarios o medidas de prevención y baja tasa de vacunación va a circular con mayor facilidad. Y es en esos contextos en donde tiene mayor probabilidad de mutar. Si lo dejamos circular en ese tipo de contexto donde hay muchos susceptibles, probablemente encuentre las condiciones para seguir mutando. En este tipo de variante que tiene una alta tasa de ataque, donde la R0 (el número de casos, en promedio, que van a ser causados por una persona infectada durante el período de contagio) es de 5, implica que la inmunidad de rebaño la vamos a lograr con alrededor del 80% de la población correctamente inmunizada, con las dos dosis de vacuna.

—¿Cómo impacta la variante en Santa Fe?

—Hoy la circulación de variante Delta en la provincia se está dando en viajeros. No tenemos circulación autóctona actualmente en la provincia. Los casos en que se han detectado fueron 9, procedentes de pacientes que llegaron desde Estados Unidos, España y Japón, y no hubo casos secundarios. Ninguna requirió hospitalización y no provocaron contagios porque todas cumplieron el aislamiento. Vamos a continuar con la vigilancia activa sanitaria en los puntos de ingreso.

—¿Cómo se compatibilizan las nuevas aperturas con la inminente llegada de la cepa Delta?

—Si se dan mayores aperturas tenemos que seguir reforzando el uso de protocolo en esos lugares. Que abra no significa que no circula más el virus, significa que me tengo que seguir cuidando con el uso del tapabocas, con la distancia social y con la ventilación de los ambientes. En el contexto epidemiológico actual se pueden dar algunas aperturas, siempre y cuando se respeten los protocolos a rajatabla. Las medidas sanitarias se van tomando en base a indicadores objetivos, en base a la situación epidemiológica que es dinámica y tienen que ver con el comportamiento global y comunitario. Por eso cada uno desde su lugar tiene que tener la responsabilidad individual del lavado de manos, ventilar los ambientes y de hacer cumplir los protocolos en los lugares de trabajo. Recomendamos cada 20 minutos, ventilar durante 5 minutos los ambientes cerrados, eso es fundamental.  O elegir espacios abiertos, pero siempre con tapabocas.

Adaptarse sin relajar cuidados

Ferrer afirma que las vacunas que se colocan hoy en Argentina brindan protección contra la variante Delta del covid, y pide que no se relajen las medidas de prevención, aunque la campaña de vacunación avance. “Nos tenemos que ir adaptando a nuevas situaciones. En base a la realidad epidemiológica vamos a poder empezar a hacer algunas actividades que no estábamos haciendo, siempre y cuando el comportamiento global y la situación de los países limítrofes permitan que podamos hacerlo. En el caso que aumenten los casos abruptamente y lleguemos a tener circulación comunitaria importante, volveremos a tomar las medidas correspondientes. No es momento de relajarse, es momento de adaptarse a las actividades que están permitidas siempre con el protocolo”, asegura.