Kelsey Hatcher, una mujer de 32 años originaria del estado de Alabama, al sur de Estados Unidos, vive con gran felicidad una doble sorpresa: los dos úteros que tiene de nacimiento fueron fecundados y ahora cursa un embarazo cada uno. Sus futuras hijas están creciendo de manera normal, pero los especialistas sospechan que el parto podría ser muy difícil, según dio a conocer el canal estadounisense WVTM 13.

Kelsey y su marido Caleb tienen una vida bastante ocupada. Ambos trabajan y tienen tres hijos, de 7, 4 y 2 años. Pensaban que su familia estaba completa hasta que Kelsey se dio cuenta de que estaba embarazada la primavera pasada. Cuando fue a su primera cita de ultrasonido, obtuvo cierta información que necesitaba para transmitirle a Caleb, 

Una rareza médica

"Un doble cuello uterino o doble útero está muy por debajo del 1%, tal vez tres de cada 1.000 mujeres podrían tener eso. Y entonces la probabilidad de que tengas un gemelo en cada cuerno es realmente loca", comentó el médico Richard Davis, de la Universidad de Alabama en Birmingham (UAB), que se especializa en embarazos de alto riesgo.

Por su parte la médica Shweta Patel, obstetra y ginecóloga y profesora asistente en el departamento de obstetricia y ginecología de la Universidad de Alabama en Birmingham, habló con WVTM, filial de NBC y dijo que el embarazo de Hatcher era "muy, muy raro", y agregó que "algunos obstetras y ginecólogos pasan toda su carrera sin ver algo como esto".

Dos úteros y en ambos embarazada
La mujer documenta todo a través de su IG @doubleuhatchlings

Los especialistas señalan que la parte difícil de su embarazo será cuando llegue la hora de dar a luz. Su embarazo estará a término para el día de Navidad. "Entonces, cuando ella entre en el momento del parto, si lo hace, entonces tendremos que monitorear cada útero y ver cuál se está contrayendo y si están haciendo casi lo mismo o son diferentes", explicó Davis.

Las hermanas podrían nacer en el mismo momento o con una diferencia de horas, días o semanas; ya que cada feto tiene su propia matriz y placenta separados. Por lo tanto, las contracciones en ambos úteros no necesariamente pudieran estar sincronizadas.