Las escuelas de gestión privada de Santa Fe confirmaron un nuevo aumento en la cuota. Según explicaron la suba es proporcional al acuerdo paritario que cerraron los docentes y que se aplicará de forma escalonada, dependiendo del porcentaje de subsidios que reciben del Gobierno provincial. 

“Hubo un primer aumento en el mes de marzo que fue del 22% con respecto a las cuotas anteriores. El mínimo actual queda en $10.300 para un colegio que recibe la categoría máxima de aportes y después se va a escalonando dependiendo la cantidad de aportes que reciben. Pero la cuota máxima va a estar en los $45.000”, explicó en Cada Día (El Tres), Alejandro Saba, referente de las instituciones privadas.

Según adelantó el directivo, entre mayo y junio se aplicarán otros dos incrementos salariales a los docentes de un 10 y un 8 por ciento. “Con esto la cuota se va a ir a un mínimo de 11 mil y un máximo de 49 mil a partir de mayo”, señaló.

Cabe destacar que estos incrementos se dan de forma proporcional entre las instituciones que reciben aportes del Estado. Es decir, que no interfieren en las cuotas de las escuelas privadas que no tienen subsidios y que ajustan su cuota de acuerdo a los gastos fijos que tienen.

Con respecto a cómo puede afectar esa suba en la cuota entre las familias de ingresos medios que envían a los chicos a las escuelas de gestión privada, Saba sostuvo que “la realidad del país hace que sea dificultoso”. “Pero también es verdad que el mismo sistema contiene a aquellos que han optado por esta forma de educación”, aseguró.

“Se pueden dar casos donde a lo mejor gente que está en un colegio con una cuota mayor busca una opción de otro colegio dentro del mismo sistema con una cuota más adaptada a sus necesidades”, insistió.

Según sostuvo, más allá de la cuota, “las instituciones tienen una función pública de contener a los alumnos”. “Más en el momento en el que estamos viviendo, no solo por la situación económica, sino porque necesitamos que los chicos estén dentro de las escuelas”, indicó. Ante esto, aclaró que en los casos donde las familias realmente no pueden cubrir el costo, “desde el colegio se buscan alternativas para que puedan permanecer”.