La causa que investigaba la golpiza a Iván, un niño en una escuela de Fighera fue archivada luego de que la Justicia entendiera que no “hay elementos” para continuar con este proceso. El hecho tuvo lugar en mayo pasado cuando el chico, oriundo de Salta, fue atacado por otros alumnos.
Debió ser internado y se le extirpó uno de sus testículos.
De acuerdo a lo publicado hoy por el diario Rosario12, el expediente que se tramitó en el Juzgado de Instrucción Nº 4, para investigar un probable "abandono de persona" por parte de los directivos, no prosperó tras la declaración del médico cirujano del Hospital Provincial que operó al niño, quien aseguró que "no se puede probar el origen de la lesión" que provocó un estrangulamiento testicular.
Con ese dato, para la fiscalía y el juzgado "no hay elementos" que permitan continuar con la investigación.
En agosto pasado, también se archivó el expediente de la Justicia de Menores, que buscó identificar a los niños que participaron de la paliza. Iván no logró reconocer a los compañeros lo atacaron por la espalda en el baño del colegio, durante un recreo.
El abogado del niño, Javier Downes, informó que presentá una acción civil contra el colegio y el Ministerio de Educación, por el daño moral causado.
El niño fue objeto de acoso escolar desde que llegó a la ciudad junto a su familia, hace dos años atrás, provenientes de Salta. En octubre de 2011, cansada de las agresiones e insultos que recibían sus hijos, la mamá, Miriam, dio aviso a los directivos y al Ministerio de Educación sobre la situación.
El 16 de mayo pasado, Iván fue atacado desde atrás. Recibió una patada en los genitales que lo dejó sin aire. "Maten al bicho", lo insultaron. Como pudo, se lavó la cara y regresó al aula. Al día siguiente, otro compañero le quitó la silla cuando pretendía sentarse, por lo que cayó en seco al suelo. Esa tarde comenzaron los dolores que derivaron en las consultas y posterior traslado e intervención, en Rosario.
La causa se dividió en dos expedientes que terminaron archivados: el de la Justicia de Menores, que intentó dar con los autores del hecho; y el de la instrucción penal que buscó responsabilidades en las autoridades y directivos escolares y ministeriales. Sin embargo, la declaración del médico del hospital Provincial fue clave para determinar que "no se pudo probar el origen de la lesión".
En el expediente consta que el cirujano "no puede afirmar" si la lesión fue causada por golpes o si se trató de una dolencia congénita, según respondió el profesional a la consulta puntual de los investigadores. Las situaciones de estrangulamiento --según figura en la causa-- comienzan con dolores, tal como sucedió con Iván.
Según el profesional, el estrangulamiento puede estar relacionado con el "frío" en los testículos o un "aumento de peso" de los mismos, entre otros factores; pero no pudo establecer si los golpes causaron el diagnóstico de "de torción y necrosamiento", por lo que hubo que extirparlo.
De acuerdo a lo publicado hoy por el diario Rosario12, el expediente que se tramitó en el Juzgado de Instrucción Nº 4, para investigar un probable "abandono de persona" por parte de los directivos, no prosperó tras la declaración del médico cirujano del Hospital Provincial que operó al niño, quien aseguró que "no se puede probar el origen de la lesión" que provocó un estrangulamiento testicular.
Con ese dato, para la fiscalía y el juzgado "no hay elementos" que permitan continuar con la investigación.
En agosto pasado, también se archivó el expediente de la Justicia de Menores, que buscó identificar a los niños que participaron de la paliza. Iván no logró reconocer a los compañeros lo atacaron por la espalda en el baño del colegio, durante un recreo.
El abogado del niño, Javier Downes, informó que presentá una acción civil contra el colegio y el Ministerio de Educación, por el daño moral causado.
El niño fue objeto de acoso escolar desde que llegó a la ciudad junto a su familia, hace dos años atrás, provenientes de Salta. En octubre de 2011, cansada de las agresiones e insultos que recibían sus hijos, la mamá, Miriam, dio aviso a los directivos y al Ministerio de Educación sobre la situación.
El 16 de mayo pasado, Iván fue atacado desde atrás. Recibió una patada en los genitales que lo dejó sin aire. "Maten al bicho", lo insultaron. Como pudo, se lavó la cara y regresó al aula. Al día siguiente, otro compañero le quitó la silla cuando pretendía sentarse, por lo que cayó en seco al suelo. Esa tarde comenzaron los dolores que derivaron en las consultas y posterior traslado e intervención, en Rosario.
La causa se dividió en dos expedientes que terminaron archivados: el de la Justicia de Menores, que intentó dar con los autores del hecho; y el de la instrucción penal que buscó responsabilidades en las autoridades y directivos escolares y ministeriales. Sin embargo, la declaración del médico del hospital Provincial fue clave para determinar que "no se pudo probar el origen de la lesión".
En el expediente consta que el cirujano "no puede afirmar" si la lesión fue causada por golpes o si se trató de una dolencia congénita, según respondió el profesional a la consulta puntual de los investigadores. Las situaciones de estrangulamiento --según figura en la causa-- comienzan con dolores, tal como sucedió con Iván.
Según el profesional, el estrangulamiento puede estar relacionado con el "frío" en los testículos o un "aumento de peso" de los mismos, entre otros factores; pero no pudo establecer si los golpes causaron el diagnóstico de "de torción y necrosamiento", por lo que hubo que extirparlo.