Ni el tiro del final. Argentina perdió la posibilidad de ser finalista en el Mundial de Básquet de Japón al caer 75-74 con España, en un partido friccionado en el que el equipo nacional tuvo la última posesión, pero en la que falló a través de un tiro de tres puntos de Andrés Nocioni.

El partido fue duro, trabado, plagado de imprecisiones y peleas y en el que si bien los europeos –salvo en el inicio– se mostraron más sólidos, la garra argentina mantuvo hasta el final a los dirigidos por Hernández a tiro en el resultado. 

El cuarto final fue para el infarto. España estuvo la mayor parte del tiempo arriba, pero sobre el final Argentina consiguió achicar la ventaja y llegó incluso a empatar. Los europeos llegaron a 75 on un tiro libre y Argentina se quedó con la última bola y 22 segundos para usarla. La llevó Ginóbili, pero los españoles le cerraron el camino al aro. Manu eligió la opción del tiro externo del Chapu, que pegó en el aro y salió, para frustración de este equipo que ahora peleará el tercer puesto con Estados Unidos, que cayó en la otra semifinal frente a Grecia.

Imprecisión y nervios fue una combinación negativa para Argentina en el tercer cuarto de la semifinal del Mundial de Japón ante Alemania. Al equipo nacional le costó demasiado convertir y se metió demasiado en la fricción, terreno en el que España pareció sentirse más cómodo. El equipo nacional se vio frustrado también por fallos dudosos de los árbitros y entró otro camino que no ayudó a encontrar el rumbo: el de la protesta. Igual, los lanzamientos de tres puntos, donde hubo mayor efectividad, le permitieron seguir a tiro en el marcador, que quedó 60-56 para los españoles   

Erró demasiado Argentina en el segundo cuarto y por eso terminó 40-38 abajo la primera mitad del partido semifinal del Mundial de Japón ante España.  

El seleccionado argentino de básquetbol arrancó con todo el trascendental partido con España y el primer cuarto terminó 21-15 arriba. El equipo nacional estuvo sólido en defensa y más certero que su rival en los tiros de tres puntos 

Pero en el segundo cuarto perdió efectividad, fue más desprolijo, y mejoró España que consiguió irse al descanso con una ventaja de dos puntos.