El partido parecía condenado a finalizar en cero. Al menos eso reflejaban los primeros minutos de juego.  Un partido chato, sin emociones, o escasas, con un Newell´s que intentó ir en busca de su tercer triunfo y un Boca que quería demostrar quién era el dueño de casa. Los dos equipos con ausencias entre los titulares por distintos motivos, el principal la fecha de eliminatorias por eso se esperaba un bajón futbolístico.

Y en ese contexto se jugaba el cotejo-en forma irregular por cierto- por la tercera fecha del apertura. Daba la sensación que para que ocurriese un gol tendría que haber un error de alguno de los protagonistas. O podía ser por el lado de Boca o por el lado de Newell´s. Y así llegó nomás el primer grito, que fue para el Xeneixe, por intermedio de una equivocación, pero no de un defensor rojinegro.  La equivocación llegó de parte del  árbitro Juan Pablo Pompei y su colaborador el señor Adrían Rastelli que omitieron una mano muy evidente de Marino dentro del área rojinegra que le permitió bajar el balón para que Viatri definiese dejando sin chances a Peratta.

Un error grosero para un juez y un asistente que tiene que impartir justicia en la elite del fútbol argentino. Cuando ocurren estas situaciones-tan marcadas dentro de un encuentro- siempre se crean suspicacias: que la Bombonera pesa, que Boca es uno de los grandes y por eso no hay que sancionarle en contra, y que si Boca no pierde- no importa si no gana, lo importante es que no caiga vencido- es mejor para el negocio llamado fútbol.

Lo cierto que esa jugada casi se lleva puesto- en la jerga futbolera significa que casi expulsar- al arquero leproso que reclamo efusivamente esta maniobra del ex Newell´s que se vió clarito en la cancha en la tele y en las innumerables repeticiones y que los únicos que no vieron fueron los máximos responsables de tener que prestar atención en el juego como es la terna arbitral.

Bueno en realidad Pompei y cia no fueron los únicos que no vieron la jugada de la mano, el relator de la televisión pública y el comentarista tampoco, pero este tema será para tratar en otro momento.

Cosas que pasan, vió. Que pasan a favor de los grandes