Ante una multitud que fue a despedirla en la plaza de Mayo, la presidenta saliente Cristina Fernández de Kirchner dio su último discurso como tal este miércoles antes de la asunción de Mauricio Macri, ceremonia a la que no concurrirá tras los desacuerdos de los últimos días y la medida judicial que indicó que su mandato culmina a las 23.59. “Miren que no puedo hablar mucho porque a las 12 me convierto en calabaza”, dijo irónica ante los militantes durante una alocución aplaudida por los militantes que llegaron a Buenos Aires desde diferentes puntos de país. Antes, la jefa de Estado había participado de un acto en la Casa de Gobierno para inaugurar un busto de homenaje a Néstor Kirchner.

En el escenario de la plaza, Cristina comenzó diciendo: “Después de estos intensos 12 años y medio con todos los medios de comunicación hegemónicos en contra, con las principales corporaciones económicas y financieras en contra, después del hostigamiento permanente del partido judicial, después de todo eso, de tantos palos en las ruedas, de tantos intentos de golpes destituyentes, estamos aquí, dando cuentas al pueblo”.

El discurso de la presidenta culminó con un desafío al próximo gobierno. “Puedo mirar a los ojos a todos los argentinos. Sólo le pido a Dios que quienes nos suceden por imperio de la voluntad popular, dentro de cuatro años también pueda frente ante una plaza como ésta decirle a los argentinos que puede mirarlos a los ojos”.

Las palabras de la presidenta incluyeron un repaso por sus políticas de gobierno y pidió que “que los argentinos tengan la misma libertad de expresión que han tenido como nunca en estos últimos doce años y medio”, al tiempo que afirmó que "lo más grande que le he dado al pueblo es el empoderamiento popular".

“Espero una Argentina sin censuras, sin represión”, dijo, y también instó a que “todos los poderes del Estado se democraticen”. Sobre el traspaso presidencial aseguró que le hubiese gustado entregar el gobierno en el Congreso. “Me hubiera encantado”, dijo la mandataria y luego agregó: “La verdad, he visto mucha medidas cautelares pero en mi vida pensé que iba a ver un presidente cautelar durante 12 horas en mi país”.

“El pueblo concurrió tres veces a las urnas. Me costó mucho ver un presidente en una sentencia judicial. No lo merecía ningún argentino”, indicó.

El busto de Néstor Kirchner

Antes de hablar ante los militantes, la presidenta encabezó este miércoles su último acto protocolar como Jefe de Estado. Fue un homenaje al ex presidente Néstor Kirchner en el Salón de Bustos de Presidentes Argentinos de la Casa Rosada. La mandataria luego salió a saludar y a dirigir unas palabras a los miles de militantes qu. coparon desde temprano la Plaza de Mayo para despedirla. 

Acompañada por el presidente de Bolivia, Evo Morales, que llegó al país para participar de la asunción de Mauricio Macri, la mandataria dijo en el acto de homenaje al ex presidente que, pese a haber asumido el gobierno con la "menor cantidad de votos" de toda la historia, Néstor Kirchner "construyó una nueva Argentina" a partir de sus "convicciones, coraje, decisión y visión estratégica".

El mandatario boliviano Evo Morales acompañó la ceremonia. (Télam)

Cristina también expresó que Néstor Kirchner se coló "por las hendijas de la historia" para "hacerse cargo de un país y de su pueblo".

Antes de salir a saludar a una multitud de militantes que la esperaban en la plaza de Mayo, presidenta pidió en su último acto oficial, que “Dios ilumine a toda la dirigencia argentina que va a gobernar el país para que piensen en este mundo nuevo y que cuiden a los argentinos, porque no hay un lugar seguro en el mundo y tenemos que tener la claridad de saber que tenemos que poner los intereses del país por sobre todo alineamiento con países extranjeros”.

Tras inaugurar el busto del ex presidente, consideró que “estamos ante un nuevo mundo y una nueva región con nuevos desafíos” para “pensar para que nuestros países puedan seguir creciendo e integrando a nuestro ciudadanos”.

La Jefa de Estado también manifestó que acualamente “hay una agenda que no es una agenda de la Argentina o de algún país en especial, sino que hay una agenda que se escribe desde afuera para la región".

Sostuvo que esa agenda "pivotea sobre tres ejes fundamentales" que son "la hegemonía mediática, un eje político y una tercera pata, que reemplazó a las fuerzas militares", a la que denominó "el partido judicial".

A su vez, Cristina recordó el "no al Alca" que se manifestó en Mar del Plata en 2005, al señalar que se constituyó no "desde una visión ideologizada" sino porque implicaba que la región se llenara de productos de afuera, por lo que indicó que "no es una cuestión de ideologías, es una cuestión de defensa de la nación, de sus trabajadores y sus comerciantes".

El busto del ex presidente

El busto del presidente que gobernó la Argentina entre el 25 de mayo de 2003 y el 10 de diciembre de 2007 quedó incorporado a la Galería ubicada en la planta baja de la Casa Rosada, en el Hall de Honor que sirve de escenario para recibir visitas ilustres.

Fue la tercera vez que la jefa de Estado descubrió un busto de un ex presidente. En 2008 inauguró el de las figuras de Héctor Cámpora (25 de mayo a 13 de julio de 1973); y de Raúl Alfonsín (10 de diciembre de 1983 – 8 de julio de 1989).

En el caso de Alfonsín, el acto se realizó con la asistencia del dirigente radical, quien en una emotiva ceremonia confesó: "Después de todos los honores y privilegios que me dio la vida, jamás hubiera imaginado presenciar la inauguración de un monumento a mi persona".

"No se sienta en la obligación de tener que dar explicaciones de esta estatua, es cierto que es un homenaje a estos 25 años de democracia, pero también es un homenaje a usted como persona porque llegó a Presidente luego de una larga vida de militante y dirigente político", le dijo Cristina aquel 1 de octubre de 2008, para luego definirlo: "Usted es el símbolo del retorno a la democracia".

Semanas más tarde, el 13 de noviembre de ese año, la jefa de Estado encabezó el acto de colocación del busto de Cámpora, un nombre "que fue sinónimo de la lealtad a Perón", aseveró la presidenta.

"Venimos nada más que a reconocerlo y a ponerlo en el lugar donde debe estar", dijo Cristina ya que "este hombre, que significó la identidad de toda su vida en un ideario, su lealtad a quien fuera tres veces presidente de los argentinos y liderara el movimiento político más importante, tal vez el que más perdura de toda Latinoamérica, merecía este homenaje, porque el otro, el de la memoria y el de la historia ya se lo había ganado él solito".

En el salón están retratados en mármol de carrera casi todos los mandatarios argentinos hasta 1983.

Néstor Carlos Kirchner nació en Río Gallegos el 25 de febrero de 1950 y llegó al poder con sólo el 22,24 por ciento de los votos (Frente para la Victoria) luego de que su oponente, el ex mandatario Carlos Menem, renunciara a la segunda vuelta electoral.