Cuando escuchó que la prensa comentaba que ella había gastado casi 300 mil euros en cirugías estéticas, sintió la necesidad de salir a desmentirlo. Y así fue como Demi Moore explicó que ella jamás pasó por el quirófano e insistió en que todos sus atributos son naturales.

La actriz tiene 47 años pero su cuerpo y su cara no corresponden a una cincuentona. De hecho, está casada con Ashton Kutcher, quien tiene 31 años. 

"Nunca me he retocado nada. Pero no juzgaría a aquellos que lo han hecho. Si es lo mejor para ellos, no veo el problema", planteó en una entrevista, que aparecerá en la edición francesa de la revista Marie Claire.

Moore explica que Kutcher, pese a ser muchos años menor, es más maduro que otros hombres de 40 y 50 años.

Consultada sobre las chances de ampliar su familia (ya tiene tres hijas de su antiguo matrimonio con Bruce Willis) la actriz planteó: "¿Por qué no? Todo es posible. Nos queda mucho por vivir y obviamente una de esas cosas es tener un hijo. Estoy muy entusiasmada con todas las posibilidades que nos ofrece el estar juntos".