El Dakar volvió a pasar por Rosario y desató una locura entre los fanáticos de toda la región que se acercaron a ver a los competidores. La fiesta de los fierreros siguió este sábado desde la madrugada, cuando motos, cuatriciclos, autos y camiones partieron hacia Buenos Aires, en el último tramo de la carrera.

A las 9.10 de la mañana salió el último vehículo de la ciudad con gran afluencia de público que, desde muy temprano, esperó ver el paso de los competidores.

Desde el municipio rosarino destacaron que todo el operativo dispuesto para el evento “se desenvolvió de acuerdo a las previsiones necesarias para un acontecimiento de esta envergadura”.

Los vehículos del Dakar comenzaron el viernes a la tarde a llegar a la ciudad y miles de seguidores disfrutaron del espectáculo en el campamento montado en el Hipódromo del parque Independencia y también en las calles.

Las motos y algunos camiones fueron los primeros en arribar, para alegría de los vecinos de la ciudad, visitantes de localidades vecinas y algunos extranjeros. Los más fanáticos habían llegado a la mañana temprano para no perderse detalles.

​Los más de 200 vehículos partieron hacia el predio de Tecnópolis (Villa Martelli, Buenos Aires) para dar fin a la competencia por la tarde, con la entrega de premios a los ganadores.