“Queremos que el Código Civil sea una casa con muchas habitaciones y todos puedan tener un lugar”. Con esa imagen el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, defendió este jueves en Rosario, donde arribó para dar un seminario, la reforma del Código Civil y Comercial y afirmó que el objetivo es garantizar la libertades de todos los ciudadanos.

El ministro afirmó que el objetivo del marco legal es “solucionar los problemas de la gente más allá de las valoraciones” que cada sector de la sociedad pueda hacer.

En ese sentido, se refirió a los reparos de la Iglesia a algunos puntos, que calificó de “razonables”, aunque les puso límites. Para Lorenzetti está bien tener una concepción de “modelo de familiar” pero “cuando legislamos tenemos que hacerlo para todos y permitir que vivan tranquilos con este Cógido Civil tanto quien es religioso como quien no lo es”.

Este viernes el titular del titular del Episcopado, José María Arancedo, expuso sus argumentos conservadores en el Congreso: la Iglesia se opone a modificaciones de lo que considera "valores sociales fundamentales" como la estabilidad matrimonial, el respeto a la vida propia y ajena, los deberes de los padres y los derechos de los niños.

“Debemos solucionar los problemas sin sustituir las decisiones que son de cada uno. Alguien puede creer en un ideal de matrimonio entre hombre y mujer, y estar determinado por una postura religiosa, pero puede haber otra gente que vive de otra manera”, afirmó el titular de la Corte, quien agregó: “Hay muchas personas que no se casan, que conviven y después tienen problemas, sobre todo la mujer porque cuando se separa no tienen cobertura”.

También puso como ejemplo la “filiación” al explicar que con la fertilización asistida surgen nuevas figuras a la "natural". “Más que valorar, lo que tenemos que hacer es solucionar los problemas de, por ejemplo, chicos que nacen y no se saben bien de quién son, sin una nueva ley”, aseguró.

“Queremos que el Código sea una casa con muchas habitaciones y todos puedan tener un lugar y respetar la elección y la libertad de cada uno de los argentinos. Estamos en una sociedad pluralista”, agregó.