La polémica por el partido de Central y Patronato llegó al Concejo Municipal, cuerpo que le pidió al gobierno de la provincia que realice gestiones para que el encuentro del domingo 10 se juegue en la ciudad capital y no en Paraná, con el objetivo de que los hinchas canallas puedan viajar a presenciar el juego.
Los ediles emitieron este jueves a la tarde una declaración, de manera unánime, en la que solicita al Ejecutivo que "agote las instancias para que el cotejo entre Patronato de Paraná y Rosario Central se dispute en la capital provincial, tal como se había estipulado en un primer momento".
El cuerpo legislativo decidió aunar tres proyectos diferentes que se habían presentado y emitir una comunicación que fue consensuada por los 22 ediles de los diferentes bloques políticos.
La reacción se da después de conocerse la determinación de la Policía de Santa Fe que se negó a brindar las garantías para organizar el operativo de seguridad del partido, que es clave para las aspiración de Central en conseguir el ascenso a la Primera.
“El Concejo Municipal solicita al Superior Gobierno de la Provincia de Santa Fe y al Ministerio de Seguridad que arbitre las medidas tendientes a garantizar la realización del partido de fútbol entre el Club Atlético Patronato de la Juventud Católica de Paraná y el Club Atlético Rosario Central, correspondiente a la fecha 36 del Torneo 2011/12 de la Primera B Nacional, en la ciudad de Santa Fe”, dice el texto consensuado.
"No es un partido cualquiera"
Los ediles del Frente para la Victoria, Roberto Sukerman y Norma López, fueron uno de los que presentaron un proyecto para que las autoridades municipales y provinciales garanticen las seguridad necesaria por parte de la policía de Santa Fe para que el encuentro se dispute en la cancha de Colón.
En contacto con el programa Radiópolis de Radio 2, Sukerman manifestó que "si la policía no puede brindar la seguridad es como que autogobierna".
Al principio, el partido se iba a jugar en la cancha de Colón con un total de 15 mil entradas para los hinchas canallas que quisieran verlo. Pero esta semana, la policía santafesina aseguró que no podría garantizar la seguridad. Por eso, se decidió trasladar el evento a la cancha de Patronato con la entrega de unas 2500 entradas para la hinchada auriazul.
Pero más tarde circuló la versión que los directivos del club entrerriano no permitirían el ingreso de hinchas visitantes por lo que los canallas no podrían ver a su club en la cancha.
“No es un partido cualquiera, puede ser un partido decisivo para el ascenso de Central y si no se hace en Santa Fe la gente no va a poder estar. La policía debe asumir el compromiso, por eso le pedimos a la intendenta que gestione ante el gobernador para que se pueda jugar acá”, concluyó.
Roberto Sukerman (Radio 2)
