El caso de Jimena es conmovedor y paradigmático. Desde que denunció a su ex pareja por violencia de género, su vida se tornó una pesadilla. Se tatuó en un brazo su número de DNI por “miedo a terminar en un descampado” y reveló a jueces y fiscales que su agresor aplicaba la picana eléctrica sobre el cuerpo de tres de sus cuatro hijos. La última advertencia fue la visita de dos matones que le gatillaron varias veces en la cabeza para amedrentarla. “Quiero justicia hoy, no quiero que mi papá y mi mamá vayan a Tribunales con una remera con mi foto a decir ”, pidió en forma desesperada.

En diálogo con la periodista Fernanda Rubio para De 12 a 14 (El Tres), la mujer actualizó su desoladora historia, que ya lleva más de 15 años: “No sé qué hace otra mujer en mi caso, yo toqué todas las puertas que pude tocar”, señaló.

“Quiero justicia hoy, viva, no quiero que mi papá y mi mamá vayan con una remera a Tribunales a decir ”, pidió la joven entre lágrimas. Y agregó: “Quiero justicia hoy porque quiero ver crecer a mis hijos”.

Jimena hizo público su caso por primera vez en marzo de este año, cuando contó su calvario en Radio 2. En ese momento mostró el tatuaje de su número de DNI junto a la leyenda “Ni una menos” y lanzó una frase alarmante: “Hacer una denuncia por violencia de género es como firmar un acta de defunción”, aseguró.

La mujer se sentía bastante protegida, aunque casi sin salir de la casa de sus padres, donde se instaló después de la separación. Hasta que semanas atrás fue amedrentada por dos hombres armados: “Sentí el arma en la cabeza, se burlaban y se decían ; eran dos personas, yo sólo veía la sombra”, contó de forma escalofriante.

“Yo les decía que no me mataran, que tengo hijos; a uno le decía ”, siguió. Y luego consideró: “A lo mejor no me mandó a matar, pero ¿si los que vininieron se cebaban o se pasaban y me mataban?”.

Jimena dijo que “fueron cinco o seis gatilladas y qué sabés si en una no sale la bala”.

Ante la pregunta sobre el estado de la causa, la víctima de agresiones y persecución de su ex pareja respondió: “La Justicia me contesta que la investigación está en curso, me dicen . Pero a mí no me tiene que pasar nada, no me puede pasar nada, eso es lo que nadie entiende”.

Por último, Jimena reveló una situación estremecedora respecto de la relación del agresor con los hijos de la pareja: “Esta Justicia es tan guacha, que son capaces de devolverle los chicos a él si a mi me pasa algo; yo denuncié que él usaba la picana eléctrica contra los chicos, y con ese dato los jueces y fiscales no hicieron nada. No se puede dejar pasar algo así”cerró.