El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, aseguró que la decisión del gobernador de Jujuy, Eduardo Fellner, de desistir de la reforma constitucional que impulsaba para favorecer su reelección por un tercer mandato "es el resultado de privilegiar responsablemente la gobernabilidad en un país que vive un momento de desarrollo excepcional y que no puede quedar sometido a la intranquilidad que generan las disputas inconducentes que promueve la oposición".

Según Fernández, el presidente le expresó a Fellner "su idea de que no deben ser las reelecciones de quienes gobiernan, temas que sirvan para generar falsos dilemas y dividir los esfuerzos que todos los argentinos debemos mancomunar ante la oportunidad que tenemos de seguir creciendo".

El jefe de Gabinete agregó que "es evidente que las carencias propias de la oposición, alimentan querellas innecesarias en torno a supuestos riesgos institucionales, pues es todo lo que pueden ofrecer en un tiempo signado por el crecimiento de las reservas y la actividad económica, y la disminución del endeudamiento, el desempleo y la pobreza".

Fernández destacó la particular madurez de Eduardo Fellner, a quien calificó "como un hombre central en el entramado del proyecto político que lidera Kirchner".

"Jujuy, una provincia tantas veces acorralada por los fracasos y las rupturas institucionales, tuvo en Fellner un punto de inflexión que le permitió convertirse en una provincia estable y bien administrada", dijo Fernández.