El Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación emitió un comunicado en el que “repudia categóricamente” la realización de nuevas maniobras militares con lanzamiento de misiles desde las Islas Malvinas entre el 8 y el 19 de octubre anunciados por las fuerzas militares británicas.

Esa cartera informó, además, que se remitieron notas normativas al secretario general de las Naciones Unidas y al presidente del Consejo de Seguridad de dicho organismo. También se enviaron a distintos organismos regionales y hemisféricos que se ocuparon de la cuestión.

“La reiteración de tales prácticas, la última de las cuales fue efectuada el pasado mes de julio, constituye una flagrante contradicción al llamamiento de la comunidad internacional para solucionar pacíficamente la controversia de la Cuestión Malvinas”, consideró la Cancillería.

Apuntó, en ese sentido, que “el lenguaje de las armas al que recurre Londres” para afianzar su ilegítima presencia a 14.000 kilómetros de distancia, denota el desprecio con el que un miembro permanente del Consejo de Seguridad se comporta ante repetidas manifestaciones de las Naciones Unidas convocando al diálogo”.

En opinión de ese ministerio, se trata de “un elemento de provocación militar que no es bienvenido por los países de la región, que trabajan para hacer del Atlántico Sur una zona de paz libre de tensiones militares y de absurdas exhibiciones de poder militar”.

El comunicado recuerda que la Argentina ha denunciado en repetidas ocasiones “la creciente militarización de las islas” y que ese comportamiento ha sido condenado por diversas organizaciones.

Según se informó, la Cancillería citó a la Embajada del Reino Unido y efectuó una protesta formal. Ha hecho lo propio con la Representación de la Unión Europea ante nuestro país.

Además, “en cumplimiento de sus responsabilidades y obligaciones en el Atlántico Sudoccidental en materia de seguridad de la navegación, en el marco de la Organización Marítima Internacional (OMI) y de la Organización Hidrográfica Internacional, la Argentina emitió los correspondientes avisos náuticos, salvaguardando los derechos de soberanía argentinos, a efectos de que el tráfico marítimo en la zona de los ejercicios militares no sea puesto en peligro por los ilegítimos ejercicios militares británicos”.

“Es de prever que el Reino Unido califique este nuevo gesto de militarización como de “rutina”. Para el Gobierno argentino, el lanzamiento de misiles desde las Malvinas y el despliegue de destructores y submarinos nucleares en nuestras aguas, por repetidos, no dejan de ser un insulto al paciente llamado de los países sudamericanos que, reconociendo la soberanía argentina de las islas en disputa, instan reiteradamente al Reino Unido a iniciar el diálogo para resolver definitivamente el conflicto de soberanía”, concluyó la nota.