Mientras se espera que más personas se pongan a disposición de la Justicia en el marco de la investigación por fraude y lavado de dinero que ya tiene a 10 profesionales y empresarios rosarinos detenidos e involucrados por sumas de unos 40 millones de pesos, desde Inteligencia en Investigación Criminal del Ministerio de Seguridad reforzaron la hipótesis de que estas personas estaban conectadas y organizadas. Incluso, se estima que habrían usado métodos violentos. Confiaron en que se profundizará el trabajo de investigación a fin de que finalice en un juicio.

En diálogo con el programa Radiópolis (Radio 2), Rolando Galfrascoli, subsecretario de Inteligencia en Investigación Criminal del Ministerio de Seguridad, consideró que las personas detenidas ayer en un megaoperativo que consistió en 20 allanamientos en los que se detuvo a 9 personas y se secuestraron dinero, armas, celulares y computadoras, podrían haber estado conectadas. “A partir del viernes, con el material y el análisis que hará (el fiscal) Sebastián Narvaja surgirán las imputaciones, se conocerán los delitos y se desnudará la mecánica para articular los elementos subjetivos y objetivos de estos delitos”, empezó.

“Vamos a saber si era algo medianamente organizado, con estrategias y herramientas o no tenían estrategias previas, son hechos inconexos”, planteó y advirtió en ese sentido: “Me inclino a pensar que había una articulación, una preconfiguración inteligente, con roles, una lógica de articulación para permitir cometer los ilícitos”. El funcionario comentó que “se trabajaba en dos frecuencias, una con engaño sofisticado de guante blanco pero cuando había que coaccionar y amenazar estaba la parte dura”. Y agregó: “Así se explica el secuestro de armas”.

Galfrascoli se refirió a los “tentáculos de la organización” y destacó que del análisis de la información “pueden surgir hacia adentro muchos otros casos”.

“Ayer se demostró que se puede golpear al delito, que el Estado puede perseguir y perseguirá al delito en todas sus manifestaciones. No vimos esta vez a los sospechosos de siempre desfilando por el pasillo de los acusados sino a quienes sortean las herramientas punitivas del Estado pero ésta vez no lo pudieron hacer”, observó.

El subsecretario de Inteligencia en Investigación Criminal remarcó que “la carta que se juega el Estado no se juega sin elementos contundentes” y aseguró que la investigación es sólida “para sostener una acusación concreta que continúe en un proceso en el que se acuse a estas personas”. Finalmente insistió: “Es un caso muy sólido”.