El tema de la reunión: incendio en las islas. El lugar: Victoria.  Asistentes: los ministros del Gobierno, los secretarios de Medio Ambiente, representantes policiales y de Defensa Civil de ambas provincias, y el intendente de la localidad entrerriana, César Gracilazo. ¿Quién faltaba? Sí, adivinó: el otro intendente interesado, el de la ciudad desde la que se planteó el problema con tal fuerza que los mandatarios provinciales no tuvieron más remedio que hacerse cargo. No, Miguel Lifschitz no estuvo en la reunión que se realizó el martes a la noche –la segunda en el día, ya que primero fue la de los gobernadores Jorge Obeid y Jorge Busti– por la sencilla razón de que no fue invitado.

Lifschitz confirmó a Rosario3.com que nadie lo llamó para que fuera al encuentro de Victoria, donde dos gobiernos provinciales justicialistas y una Intendencia justicialista acordaron acciones comunes con el gobierno nacional justicialista.

No, Lifschitz no es justicialista. ¿Por eso no lo invitaron? “No, no sé –se atajó el intendente rosarino ante la consulta de Rosario3.com–. Pero sería preocupante que el tema de los incendios en las islas entre en el terreno de las competencias políticas”.

¿Pero no es extraño que no hayan invitado al intendente de Rosario al encuentro? “No me parece extraño”, dijo Lifschitz. Y dejó entrever su sospecha de que las reuniones del martes formen parte de una puesta en escena para contrarrestar el hecho de que haya sido la Municipalidad quien reinstaló con fuerza el tema del fuego en las islas en la agenda de la dirigencia política, con la reunión realizada días atrás en la Secretaría de Servicios Públicos en la que legisladores de distintos partidos y funcionarios analizaron una estrategia común.