Personal de Gendarmería y Prefectura siguen adelante con la protesta en las puertas de ambas sedes en bulevar Oroño y en avenida Belgrano. Este martes se cumplirá una semana del comienzo del conflicto que empezó con un reclamo salarial por parte de la Prefectura, y al que luego se sumó la Gendarmería. Las fuerzas esperan una respuesta del gobierno nacional para definir el rumbo de la protesta.
"Estamos haciendo una vigilia acompañando a la gente de Buenos Aires y esperamos que esto se solucione pronto", dijeron los oficiales de Prefectura que se convocaron en Belgrano al 300. Y agregó que "se levantará la medida si en Buenos Aires aceptan la propuesta del gobierno".
Según un petitorio elaborado por los efectivos, entre las reinvindicaciones salariales aparece un piso de 7 mil pesos en bruto.
El conflicto se inició el pasado martes, cuando agentes de Prefectura Naval comprobaron que se les había reducido entre un 30 y 60 por ciento sus salarios por la aplicación del decreto presidencial 1307, y a la protesta se sumaron poco después suboficiales de Gendarmería.
Tras la suspensión de la medida que dispuso el Gobierno, los efectivos extendieron sus exigencias y pidieron un piso salarial de 7 mil pesos en blanco, la sindicalización, la libre elección de una obra social, la asignación de una ART y la garantía de que no habrá represalias.
Justamente, al cumplirse siete días, también vence el plazo ofrecido por el subsecretario de Seguridad Sergio Berni para dar una respuesta acerca del petitorio elevado por la protesta.
En el fin de semana, de parte del Gobierno, el único funcionario que habló en las últimas horas fue el subsecretario general de la Presidencia, Gustavo López, quien ratificó que la Casa Rosada dará el martes "una respuesta" al petitorio presentado por los prefectos y gendarmes el viernes pasado.
