Un hecho insólito y trágico se produjo este jueves. En realidad fueron dos: primero la policía halló un cadáver en el Arroyo Saladillo cerca de las 14.30 y una hora y media más tarde, Prefectura dio con un segundo cuerpo, esta vez en el río Paraná, frente a los galpones del CEC. 

En el segundo caso, pasadas las 16.30, personal de Prefectura aún trabajaba en el lugar y la víctima no fue identificada. 

El primer cuerpo, en cambio, fue hallado en el Arroyo Saladillo. Este jueves, alrededor de las 14.30, personal policial de la seccional sub 20 fue advertido de la presencia de un cuerpo sin vida que flotaba en el arroyo Saladillo, a la altura de calle Pineda, debajo del puente del ferrocarril de la empresa Nuevo Central Argentino.

En base a las declaraciones de un familiar de la víctima que se acercó al lugar, todo indica que se trataría de Sebastián Ramírez, un hombre de 30 años que habría cumplido una condena en la cárcel de Coronda y que desde hace unos días había sido visto en la zona por vecinos de Villa Gobernador Gálvez. Según testimonios de quienes lo conocían, el hombre consumía drogas.

Participaron del rescate la división Criminalística de la policía provincial y una dotación del cuerpo de Bomberos Zapadores. Aún resta la confirmación policial respecto de la identidad de la víctima.