El ultraderechista Jair Bolsonaro ganó este domingo las elecciones presidenciales en Brasil con un 55,42 % de los votos válidos y sucederá al mandatario Michel Temer el próximo 1 de enero, para gobernar el país hasta 2022, tras haber sido concluido el 97,38 % del escrutinio.

De acuerdo a los resultados oficiales, Fernando Haddad, el candidato que sucedió al encarcelado expresidente Luiz Inácio Lula da Silva como candidato del Partido de los Trabajadores (PT), obtuvo un 44,58 % de los votos válidos.

El ultraderechista, aspirante por el Partido Social Liberal (PSL) y un polémico candidato por su defensa de la dictadura militar (1964-1985) y por sus declaraciones consideradas racistas, machistas y homófobas, confirmó su favoritismo y consiguió una votación ligeramente superior a la pronosticada por los últimos sondeos.

La jornada electoral, que duró nueve horas, transcurrió con normalidad y sólo tuvo algunos incidentes aislados.

Según el Tribunal Superior Electoral (TSE), hasta las 15.50 hora local se habían registrado 299 delitos electorales en todo el país, que concluyeron con 132 personas detenidas, en su mayoría por hacer proselitismo político cerca de los colegios electorales.

El tribunal también informó de que hasta las 15.48 hora local, es decir poco más de una hora antes del cierre de la mayoría de los colegios electorales, había sustituido 3.841 urnas electrónicas que registraron fallas, que corresponden tan sólo al 0,74 % de los 454.494 artefactos instalados en todo el país, y que tan sólo en tres colegios fue necesario recurrir al tradicional voto en papel.

La expresidenta de Costa Rica Laura Chinchilla, jefa de la misión de observación electoral enviada por de la OEA en Brasil, afirmó que los comicios transcurrieron con total "normalidad" y sin incidentes.