El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, y el jefe del Ejecutivo español, José Luis Rodríguez Zapatero, hicieron este martes un firme llamamiento al gobierno de facto de Honduras para que respete la integridad de la embajada brasileña en Tegucigalpa y del derrocado presidente hondureño, Manuel Zelaya, refugiado en ella.

Lula y Zapatero se reunieron en Nueva York, donde ambos asisten a la cumbre sobre cambio climático, organizada por Naciones Unidas, y mostraron su "preocupación" por la "frágil" situación que atraviesa Honduras, según explicó a los medios de comunicación el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

España está manteniendo contactos informales con las autoridades de facto hondureñas y con personalidades de la vida política y social del país para garantizar que no se viole la integridad de la misión diplomática brasileña, apuntó Moratinos, quien habló telefónicamente con Zelaya.

Tanto Brasil como España están preocupados con la posibilidad de que la situación "se desborde" y corran riesgo tanto Zelaya como el personal que permanece dentro de la Embajada, que se encuentran prácticamente sin alimentos y sin agua, según el jefe de la diplomacia española.

España está a la espera de los pasos que de el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, que ha tenido que aplazar este martes su viaje a Honduras por el cierre de los aeropuertos decretado por el gobierno hondureño de facto.

Según explicó, Insulza podría decidir convocar una reunión de los países más implicados en la crisis, y España ya ha mostrado su interés en participar para trabajar en favor de "una solución pacífica que permita restaurar el orden constitucional".

Desde Tegucigalpa, Zelaya aseguró hoy que "nadie" le volverá a sacar de su país, al que ha regresado 68 días después del golpe de Estado del 28 de junio, en que militares le sacaron del país y el Parlamento designó a Roberto Micheletti como presidente.

Micheletti promete respetar la embajada

El presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, aseguró hoy al gobernante de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, que respetará la embajada brasileña en Tegucigalpa, que aloja al depuesto mandatario hondureño, Manuel Zelaya, en su regreso al país.

"Le digo públicamente al presidente Lula da Silva: nosotros vamos a respetar su sede, porque esa es tierra del Brasil y la vamos a respetar, siempre y cuando ellos contesten a nuestras peticiones", expresó Micheletti en declaraciones a la prensa en la Casa Presidencial.

Reiteró, sobre esa solicitud, que "ese señor Zelaya tiene procesos incoados aquí en Honduras y lo conveniente sería: o le dan asilo ellos en su país o lo entregan a las autoridades".

Taiana se sumó al pedido

El ministro de Relaciones Exteriores de la Argentina, Jorge Taiana, pidió este martes al presidente de facto de Honduras que cese la "represión" contra los manifestantes en favor del derrocado Zelaya.

El canciller argentino, quien asiste a la cumbre sobre el cambio climático y a la 64 Asamblea General de la ONU en Nueva York, pidió que "no se use la represión del Gobierno de facto de Honduras contra los manifestantes que piden en Tegucigalpa que el presidente constitucional, Manuel Zelaya, sea repuesto en su cargo".

Taiana apeló al "diálogo", así como a encontrar una "pronta solución" a la crisis y a que "no se use la represión", al tiempo que informó de que los cancilleres de la región intercambiaron hoy información sobre la reunión de urgencia celebrada anoche por la Organización de Estados Americanos (OEA).

En la reunión extraordinaria del organismo interamericano se solicitó que se cumplan sus disposiciones y que Zelaya sea repuesto en su cargo.

"Ahora la prioridad es velar por la integridad física de Zelaya y de los hondureños", subrayó Taiana, quien también lamentó que los incidentes ocurridos en Honduras "hayan causado una víctima fatal en las últimas horas, según información extra oficial", señaló en un comunicado de prensa la cancillería argentina.

En Tegucigalpa, unas 150 personas fueron detenidas hoy a raíz de los disturbios registrados tras el desalojo de los seguidores de Zelaya apostados frente a la embajada de Brasil y por no acatar el toque de queda.

Fuente: EFE