El Consejo Superior de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) aprobó este martes, de manera unánime, el proyecto de protocolo de Acción Institucional para la prevención e intervención ante situaciones de violencia y discriminación de género. Se da luego de la polémica por acusaciones y escraches a varios profesores acusados de diferentes tipos de acoso a alumnas.

El rector Héctor Floriani subrayó la importancia de promover acciones que favorezcan la visibilización, sensibilización y producción de conocimiento acerca de la perspectiva de género, dentro de los ámbitos de investigación, docencia, comunicación institucional y política educativa.

A su vez, recordó que si bien hace tiempo que se viene trabajando en esta problemática de diversas maneras, era necesario contar con una herramienta que fuera construida por muchos actores de distintos espacios, como lo es en este caso.

Por último, manifestó que la aprobación del proyecto es "un paso adelante en el camino a lograr una universidad libre de violencia de género".

Según indicó la UNR a través de un comunicado, la nueva norma tiene como objeto “garantizar en la universidad un ambiente libre de discriminación, hostigamiento y violencia por razones de identidad sexual y género, promoviendo condiciones de igualdad y equidad”.

También busca adoptar “medidas de prevención como principal método de combatir este tipo de acciones y generar un ambiente de contención y confianza para que las personas afectadas puedan denunciar su situación a fin de hacerlas cesar de inmediato”.

La sesión se llevó a cabo en Sede de Gobierno de la UNR y contó con la participación de representantes de distintos núcleos de género de todas las facultades, que expresaron su adhesión a la nueva legislación y manifestaron su compromiso a seguir trabajando conjuntamente.

La normativa promoverá “acciones para prevenir, sancionar y erradicar la violencia sexista y/o de género dentro del ámbito universitario y se regirán a partir de un abordaje integral e interdisciplinario, sustentados en una mirada que se aboca desde la complejidad, la singularidad y particularidad de cada una de las situaciones”.

Para facilitar su implementación y articulación se conformará un equipo interdisciplinario integrado por referentes o responsables de los espacios de atención de situaciones de violencia de cada unidad académica y de la universidad que funcionará bajo el ámbito de la Secretaría General. Esta área realizará informes de manera conjunta a pedido de las autoridades para monitorear su correcta implementación.

Las personas responsables de la coordinación del plan de acción serán dos personas graduadas en la UNR con experiencia y formación relativa a los derechos humanos con perspectiva de género. La designación de las mismas se realizará mediante concurso y durarán en el cargo dos años.

Talleres, charlas y campañas

El equipo interdisciplinario tendrá entre sus funciones las de diseñar e implementar actividades destinadas a crear conciencia en la comunidad universitaria, que comprenden la organización y realización de talleres, charlas y campañas.

También será encargado de crear un registro estadístico de situaciones de violencia de género que se planteen en el ámbito de la universidad y promover el desarrollo de proyectos de investigación que aporten al estudio de la perspectiva de género en las currículas de grado y posgrado.

También tendrá la tarea de impulsar a la conformación de espacios específicos en cada unidad académica como a la atención de las situaciones de violencia y discriminación de género.

El debate sobre la necesidad de un protocolo para los casos de violencia de género comenzó a fines de mayo luego de las denuncias públicas contra docentes de la UNR.

En aquella oportunidad el rector Héctor Floriani resolvió la apertura de sumarios y/o juicios académicos según corresponda. Mientras tanto, el Consejo Superior comenzó a preparar el protocolo común a todas las facultades para el tratamiento de denuncias de este tipo.