Preocupados están los arquitectos rosarinos. Es que el boom de la construcción, entienden, se ha convertido en un recuerdo. Según cálculos del Colegio de Aqruitectos, el sector tuvo una caída de alrededor del 50 por ciento en el último año.

José Sarúa, presidente del Colegio de Arquitectos, sostuvo que el "amesetamiento" es "producto de que no hay inversión genuina" y que sin ella "es muy difícil que arranque otra vez la cosa".

El profesional advirtió que la situación se agrava si se tiene en cuenta que no hay obras nuevas, apenas "se está terminando lo existente", entre lo que incluyó grandes emprendimientos, que demandaron muchísima mano de obra, como el casino.

"Nuevas inversiones no hay", insistió Saruá.