El uso de las redes sociales por el público más joven, entre 11 y 20 años, ha crecido de manera exponencial en los últimos años hasta convertirse en la referencia de comunicación por Internet. Más del 90% de ellos ha accedido a alguna de ellas, sobre todo para hablar con amigos a los que ven con frecuencia. Sin embargo, en un 40% de los casos, los padres lo desconocen, según revela el estudio “La juventud y las redes sociales en Internet”, presentado en España por la Fundación Pfizer.

El informe, elaborado a través de 2.000 entrevistas -mil a hijos y mil a padres-, señala este último problema como el principal. Además, ocho de cada diez jóvenes usuarios de redes sociales reconoce tener su propio perfil -datos personales, imágenes, vídeos- en alguna de estas comunidades digitales.

Dentro del hogar, la mayoría de los adolescentes utiliza la computadora en su propia habitación, exclusiva de él o ella -en 42,5% de los casos- o compartida -10,7%-. Sólo uno de cada cinco lo hace en un lugar común como el salón familiar, por tanto a la vista de los padres u otros adultos del hogar. La juventud y las redes sociales en Internet también explica que casi el 70% de los menores encuestados se conecta a Internet sin que sus padres ejerzan ningún control sobre qué páginas visitan o con quién chatean.

Esta brecha tecnológica cada vez crece más, ya que "algunos progenitores no saben enviar archivos adjuntos y ni imaginan que puede llegar un virus a su ordenador, por ejemplo. Así que enfrentarse al uso que sus hijos hacen de la tecnología es una tarea de titanes que no se plantean", se explica en las conclusiones del trabajo.

Francisco J. García Pascual, director de la Fundación Pfizer, insistió en que hay que encontrar fórmulas para solucionar el problema de la brecha digital entre padres e hijos y subrayó que "la principal conclusión del estudio es que las redes sociales se encuentran totalmente incorporadas en el día a día de los adolescentes, frente a un elevado porcentaje de padres que desconocen en su totalidad, o se han incorporado con más lentitud, este tipo de herramientas de comunicación".

Los pocos jóvenes con una opinión negativa sobre las redes sociales (37 de los 1.000 encuestados), basan sus críticas en los peligros asociados a las mismas, en general -"la redes pueden estar abiertas a engaños, mentiras", es uno de los argumentos más citados. Aunque con menos peso, los jóvenes también indican como aspecto negativo la falta de privacidad que pueden acarrear las comunidades digitales, como "problemas con los datos personales".

Fuente: Tendencias 21