Tres horas fueron suficientes para que Miguel Lifschitz se deje conocer un poco más. Invitado en el programa Los Notables de Radio 2, el intendente de Rosario respondió a las preguntas y reclamos de los oyentes y se animó a una conversación más íntima con la periodista Sabrina Nardi. Admitió problemas en la gestión y falta de recursos, criticó al gobierno nacional por no combatir la pobreza estructural y también fue contra el senador Carlos Reutemann por su alejamiento de la bancada oficial en la Legislatura nacional. “Tengo una visión positiva de mí”, aseguró y confesó gozar actualmente del amor, de sus hijos y de amigos aunque observó: “Lo de la soledad del poder es cierto, es una tarea ingrata y las decisiones recaen en mi espalda”.

Consultado acerca de una baja en la consideración de los rosarinos acerca de la gestión, Miguel Lifschitz se atajó: “Momentos más bajos, un gobernante tiene, hay que acostumbrarse. A veces tiene que ver con la gestión pero también hay un clima externo que impacta. Este 2008 había mucha expectativa favorable en todos los aspectos que luego cayó con el conflicto agrario primero y la crisis financiera internacional. Hay mal humor en la sociedad, la sensación de la inflación y la pérdida de poder adquisitivo de los sueldos repercute en una mayor demanda hacia quienes están en el gobierno”.

La mayoría de los llamados de los oyentes fueron para plantearle al jefe de gobierno local problemas con los servicios de recolección de residuos, con el barrido de las calles, con el transporte y el aumento de la TGI. En líneas generales, el intendente asumió ciertas irregularidades pero también argumentó que “el aumento de los costos de servicios ha sido impresionante sobretodo en el de barrido” y explicó: “A veces los aumentos en las tasas tienen que ver con poder sostener estos servicios”.

“No puedo hacer magia, no puedo atender todos los reclamos sin los recursos suficientes” se quejó y agregó: “Es por eso que reclamamos a la provincia el dinero adeudado y la provincia también le reclama a la Nación porque es necesario que quienes prestamos servicios tengamos un recupero”.

“El dinero lo invertimos en lo social, es una inversión necesaria porque estamos invirtiendo en las personas para garantizar derechos básicos como es la salud”. En ese sentido, afrontó la gran demanda en los hospitales de la ciudad: “Estamos en una rueda que no tiene fin, siempre al borde del colapso porque a medida que aumentamos la cantidad de efectores, de personal, de tecnología, aumenta en proporción la demanda que debemos atender “.
El transporte fue otro de los temas calientes. Al respecto Lifschitz indicó: “Resolver el problema del transporte es como decir que se puede resolver la pobreza estructural. El problema es económico no de planificación porque si la tarifa cubriese el costo podríamos tener le transporte que queremos, el gran problema es que hay una distancia entre lo que puede pagar el usuario y el costo real del sistema”. A continuación resaltó la tarea realizada en ese aspecto y aseguró : “Trabajamos para pensar en el transporte para el futuro”.

¿Lifschitz gobernador?

La pregunta sobre su posible candidatura a gobernador de Santa Fe no se hizo esperar. La respuesta fue elíptica aunque admitió que lo seduce la idea: “La aspiración como en cualquier profesión o trabajo es tener la mayor responsabilidad, siempre está la expectativa de asumir un gobierno provincial” pero luego advirtió: “Soy parte de un proyecto. Si me dijeran de ser gobernador, tengo ganas pero también de ser diputado o ministro. Es decir, en cualquier lugar donde se pueda trabajar y cumplir con la gente”.

Autonomía y otras deudas

“Siempre nos encontramos con una pared”, manifestó sobre el proyecto de autonomía para Rosario. “No hay decisión del partido justicialista de impulsarla”, apuntó pero se mostró confiado en que se llegará a puerto: “Confío que vamos a torcer el brazo de quienes ponen reparos. Más tarde que temprano vamos a tener la autonomía municipal”.

Sobre las deudas por coparticipación de parte del gobierno provincial, el intendente aclaró: “Hay una deuda de entre el 2003 y 2007 que en su momento reclamamos al ex gobernador Jorge Obeid. Ya hicimos un reclamo formal que ahora es atendido por la gestión de Hermes Binner” y acentuó: “A partir del primer día de Binner en la gobernación, se normalizaron los aportes de coparticipación”.

La relación con los K

Nardi le preguntó sobre su verdadera vinculación con la presidenta Cristina Kirchner en base a lo sucedido en el acto en La Lata, donde Binner fue silbado y Lifschitz no. A esto último, el intendente le restó importancia y negó una simpatía especial con el gobierno nacional: “Hemos mantenido una relación correcta y formal con el anterior presidente y con la actual presidenta porque mi tarea es resolver los problemas y conseguir soluciones para la ciudad. Todos sabemos que somos socialistas y nuestro parecer sobre el Frente para la Victoria pero eso no es obstáculo para encarar proyectos para los rosarinos”.

Sin embargo, no perdió oportunidad para pronunciarse en contra de la política social encarada por Cristina: “Argentina debe resolver la pobreza estructural y garantizar la redistribución de la riqueza y ahí está en deuda. Todas las medidas que propusieron apuntan a reactivar el consumo del sector medio, que no está mal, pero hay que pensar en los sectores que no consumen”.

Finalmente, en relación al alejamiento de Carlos Alberto Reutemann de las filas kirchneristas, opinó: “Creo en la gente que tiene coherencia política por eso pertenezco al socialismo y lo asumo con sus defectos y virtudes. No me gustan los que están de un lado y después del otro, los que abandonan el barco ante las primeras fisuras”.