Unas 25.000 personas se manifestaron esta mañana por las calles de Bruselas en defensa de la unidad de Bélgica. La marcha se dio en el marco de una crisis sin precedentes en el país que puso al descubierto los temores frente a una eventual separación entre francófonos y flamencos.

"Por la unidad", se leía en la pancarta que encabezó la manifestación. El cartel podía leerse en las tres lenguas que se hablan en el país: francés, holandés y alemán.

Al menos 25.000 personas, en su mayoría francófonos, marcharon pacíficamente durante dos horas.

La manifestación surgió de una iniciativa de una vecina de Lieja, Marie Claire Houard, quien impulsó una petición a favor de la unidad del país. En tres meses, la mujer recogió unas 140.000 firmas de apoyo.

El conflicto surge porque a más de cinco meses de las elecciones legislativas, los partidos políticos flamencos y francófonos no logran ponerse de acuerdo sobre la formación de un gobierno debido a sus diferencias sobre el grado de autonomía que reclaman los primeros.