“Esta mañana me hicieron la resonancia y se confirmó que es un esguince. Muchas gracias por los mensajes de apoyo”.

La frase que Maxi Rodríguez, el volante de Newell´s, escribió en Twitter suena a alivio. Es que aunque nadie lo decía, en el club del Parque se temía que la lesión que sufrió en la rodilla izquierda en el partido con Lanús, y que lo obligó a salir, fuera una rotura de ligamentos, lo que lo hubiera alejado varios meses de las canchas.

Pero tanto la Fiera como el médico del plantel, Juan Ignacio Bóttoli, se encargaron de descartarlo. "Tiene una lesión en el ligamento lateral interno, un esguince de primer grado. Está inflamada la rodilla y ya se ha descartado por imágenes una lesión de ligamento cruzado, que era lo más grave", dijo el facultativo.

La preocupación tenía además un antecedente: Maxi ya fue operado de esa rodilla, lo que llevó al médico Juan Bóttoli a no arriesgar diagnóstico hasta tener el resultado de la resonancia.

"Por el mecanismo de producción de la lesión y porque las rodillas operadas a veces dejan dudas, se tomó la decisión de sacarlo de la cancha", remarcó Bóttoli, que pese a que no lo quiso descartar para el partido del lunes que viene, deslizó que el volante llegaría con lo justo.

"Esta semana ni los trabajos físicos ni los técnicos debiera realizar, porque lo importante ahora es sacarle el dolor. Si el viernes se encuentra en condiciones, va a practicar en el entrenamiento de fútbol. Pero va a trabajar diferenciado esta semana completa", cerró.