Buenas noticias. A un año de que estallara el conflicto en Naranpol, todo indica que la empresa de gaseosas está muy cerca de volver a productir.

Trabajadores y nuevos dueños firmarían este lunes un acuerdo en la delegación local del Ministerio de Trabajo de la provincia, según detalla el diario El Litoral. Se estima que, en unos diez días, la compañía estaría trabajando normalmente.

El conflicto comenzó en mayo de 2011, cuando la empresa presentó un concurso preventivo de acreedores. Desde entonces, hubo 17 conciliaciones obligatorias y numerosas audiencias. Recién ahora se vislumbra una salida. Representantes gremiales y el nuevo dueño de la firma, Carlos de los Santos, firmarían este mismo lunes un convenio que permitiría retomar la actividad. La empresa propiedad de la familia Galán fue vendida en abril de este año a la firma Disgrabel SA, que no abonó dinero: en cambio, se hizo cargo del pasivo de la firma que ronda los 140 millones de pesos.

“Estamos muy satisfechos con el acuerdo alcanzado”, aseguraron desde el Sindicato Único de Trabajadores de la Industria de Aguas Gaseosas al diario El Litoral. “El nuevo dueño de la empresa se comprometió a cumplir con el convenio colectivo de trabajo, a reincorporar a todos los despedidos y a hacerse cargo de la deuda, que es de entre 55 y 65 mil pesos por trabajador, de los cuales entre 5 y 6 mil pesos los pagará apenas vuelvan a cumplir con sus tareas. También aseguró que va a pagar las deudas que tiene con el gremio por los aportes a la obra social y sindicales, que suman de entre 4 y 5 millones de pesos. En síntesis, volvimos a abril de 2011”, resumieron los dirigentes.