Dos fuertes sismos tuvieron lugar en el norte de Chile en la madrugada de este sábado, con magnitud superior a 6 en la escala Richter. Es una réplica del terremoto de 8,4 grados registrado el miércoles y que produjo hasta movimientos en varios puntos de Argentina, entre ellos, Rosario.

El Centro Sismológico Nacional indicó que el primero tuvo magnitud 6,3 y se registró a las 2:06, con epicentro a 101 kilómetros al noroeste de Tongoy, mientras que el segundo fue de 6,0 y ocurrió a las 6:07 a 32 kilómetros al noroeste de Canela Baja.

La Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (Onemi) del país trasandino confirmó anoche que la cantidad de personas fallecidas aumentó a 13 y agregó que hay 6 desaparecidos.

La última víctima fatal se trata de un hombre de 59 años, identificado como Luis Olivares González, que vivía en situación de calle. Fue hallado durante la remoción de escombros en un barrio de la localidad de Coquimbo, la más afectada por el terremoto y tsunami.

El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, indicó que todavía hay 1.594 personas damnificadas por el terremoto. Además, hay 1.323 viviendas que poseen un daño menor y son habitables, 418 con daño mayor y 262 destruidas.

Pese a esto, la situación en la zona del norte de Chile se empezó a normalizar a medida que los equipos de ayuda, los vecinos y algunos voluntarios trabajan en la remoción de escombros, limpieza de calles y viviendas y el restablecimiento de los servicios básicos.

Superada la fase de la emergencia, las autoridades se abocan a restablecer el tránsito en las rutas y garantizar el suministro de electricidad y agua potable en las localidades que resultaron dañadas.