La obra social de los jubilados revisará la medida tomada en los últimos meses en relación con el traspaso de afiliados a efectores privados y destaca la conformación de un grupo de contención para que el traslado sea debidamente informado en los casos que sea posible realizarlo. El anuncio se produce luego de la protesta de los afiliados que se resisten a ser trasladados de manera compulsiva.

Este martes, el titular de la Regional IX de la obra social, Tomás Aletta Da Silva, confirmó en diálogo con el programa La primera de la tarde, de Radio 2, que reconsiderarán el traspaso de algunos jubilados que había sido ordenado por la gestión del Pami a nivel nacional, ante el desborde que atraviesa el policlínico Pami I.

"Estamos relevando los casos de disconformidad y evaluando cada uno en particular”, dijo Aletta Da Sylva, y aseguró que “aquellos afiliados que por su patología requieran continuidad de tratamiento en el actual efector. Además, también se tendrá en cuenta la situación personal de algunos afiliados que se atienden desde hace 25 o 30 años con el mismo médico de cabecera y no desean cambiarlo”, aseguró el funcionario.

Al mismo tiempo, el responsable del Pami en Rosario explicó que se conformó un grupo de contención que tiene la función de informar debidamente los cambios a los afiliados. “Yo preferiría no haber tenido que tomar esta medida, pero la situación de desborde lo requiere”, afirmó Aletta Da Sylva, quien fijo como fecha tope de este mes, el día 20 de marzo para cerrar la distribución de pacientes que se concretará en abril próximo.

Para mayor información, los interesados pueden al 138 del Pami Escucha o bien dirigirse a la Delegación IX del Pami, de calle San Lorenzo al 900.

A comienzos de marzo, desde ATE denunciaron el vaciamiento de la institución que atiende a los jubilados y precisaron que entre diciembre de 2011 y febrero pasado, más de 13 mil afiliados fueron traspasados a instituciones privadas.

“Esta situación generaría la pérdida de puestos de trabajo para los médicos y profesionales de la salud, además de la pérdida de la calidad de atención de los abuelos que hoy se atienden en los policlínicos del Pami en la ciudad”, expresaron en un comunicado.