El Programa de Equidad Educativa para que alumnas madres y embarazadas puedan seguir estudiando tuvo su apertura formal este jueves a las 16 en el Centro Asturiano, San Luis 644.
Este año se inscribieron 348 chicas que estuvieron presentes en el acto junto a sus hijos y familiares, el intendente municipal, Miguel Lifschitz, el secretario de Promoción Social, Pedro Pavicich y autoridades municipales.
Las integrantes del Programa (de 14 a 18 años) perciben una beca escolar y participan, durante los 10 meses que dura el programa, en talleres como "Derecho a una vida sin discriminación, repensando lo femenino", "Derecho a una vida libre de violencia (noviazgo no violento)", "Derecho a una vida sexual plena y responsable", entre otros.
Según el informe que realizaron desde Promoción Social, la mayoría de las chicas tiene 18 años (el 47 por ciento) y el 77 por ciento del total tiene hijos (el 22 por ciento están embarazadas). En cuanto a la distribución por zonas, casi el 42 por ciento son del oeste mientras que sólo el dos por ciento corresponden al centro.
El acto
El ciclo 2007 del programa fue inaugurado con un acto en el que las adolescentes inscriptas fueron recibidas de una forma muy especial: el grupo de teatro Chemiguitos les dio la bienvenida con globos, mariposas, títeres, zancudos y mucha brillantina.
Luego, los presentes pudieron disfrutar de música, una obra de teatro y finalmente de un video institucional en el que las principales protagonistas son las chicas.
El Programa de Equidad Educativa depende del Área de la Mujer de la Secretaría de Promoción Social y tiene como objetivo colaborar en la permanencia de adolescentes madres y embarazadas en la escuela. Las chicas inscriptas perciben una ayuda económica que les facilita la tarea de llevar adelante sus estudios en el sistema educativo formal.
También, participan durante diez meses de una serie de talleres en los que pueden intercambiar experiencias entre pares y adquirir mayores conocimientos en cuanto a sus derechos a una vida libre de violencia, a una sexualidad plena y responsable y a su desarrollo personal y social.
El análisis de los datos
Para la Municipalidad, la información obtenida desde las inscripciones se deduce que el mayor número de adolescentes embarazadas y/o con hijos pertenecen a los distritos con poblaciones con menores recursos socioeconómicos, estos son los distritos oeste y noroeste. Situación que se repite en los dos últimos años (2005-2006).
La situación de pobreza desde una perspectiva de género ha sido llamada también puerta de entrada al ciclo de la pobreza, ya que el impacto del embarazo en la adolescencia se traduce en deserción y/o bajo rendimiento escolar, mayor número de hijos, desempleo, fracaso en la relación con la pareja e ingresos inferiores de por vida, según el comunicado oficial.
El embarazo, la falta de apoyo familiar, contribuyen en un 14 por ciento a que las adolescentes dejen los estudios.
La mayoría de las adolescentes inscriptas se encontraban en serio riesgo de no continuar su escolaridad formal; la posibilidad de inscribirse a este programa operó como una oportunidad de permanecer en la escuela, impidiendo de alguna manera la deserción.